Llegó la viuda de Wilson Pacheco
La viuda del ecuatoriano apalizado se manifestará hoy en el Maremàgnum
Ivonne Guzñay, la viuda de Wilson Pacheco, el ciudadano ecuatoriano que murió ahogado en el Maremàgnum tras ser apalizado por vigilantes y porteros del complejo, llegó pasada la una del mediodía de ayer, procedente de Guayaquil. Frágil, con aspecto cansado y llorosa, sólo fue capaz de decir que se enteró de la muerte de su marido por una llamada de la hermana de éste y que se sentía 'muy mal'. Cuando llegó, se encontró completamente sola. Ninguna administración había previsto asistencia para ella.
La joven viuda se aloja en casa de su familia en Premià de Mar. Se encuentra 'muy deprimida' y 'no hace más que llorar y llorar', según explicó Anabel Intriago, presidenta de la Asociación de Ecuatorianos de Cataluña. En cuanto llegó a casa, Ivonne pidió leer los recortes de prensa que han recogido la noticia 'para enterarse bien de lo que ha pasado'. No se explica cómo puede ser que su marido muriera 'si sólo salió a divertirse' y a tomar unas copas.
Tanto Guzñay como sus familiares asistirán a la manifestación de repulsa a la violencia que varias asociaciones de ecuatorianos y organizaciones no gubernamentales han convocado hoy. La manifestación saldrá a las cinco de la tarde de la plaza de Catalunya y bajará por la Rambla hasta el Maremàgnum, donde se realizará un homenaje a Wilson Pacheco.
Los tres hijos de la pareja llegarán a Barcelona la próxima semana, probablemente el martes o el miércoles. La Secretaría para la Inmigración de la Generalitat se ha ofrecido para costear el viaje de los pequeños, dos niñas y un niño de seis, cinco y dos años respectivamente. Javier Pedreño, coordinador de la Asociación de Ecuatorianos, explicó que se han recaudado 3.500 euros en donativos, que han permitido costear el viaje de Guzñay y sufragarán los gastos del entierro de Pacheco.
El entierro se celebrará la semana próxima, después de que se efectúe una segunda autopsia al cadáver para aclarar las circunstancias de su muerte y si el cuerpo presenta daños internos. Para el nuevo examen forense, a instancias de la asociación, el abogado de la familia ha solicitado a la juez que instruye el caso la presencia de un médico de nacionalidad ecuatoriana.
Mientras tanto, continúa el cruce de acusaciones por la responsabilidad de las distintas administraciones en el suceso. Los concejales de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona, Joan Puigdollers y Joaquim Forn, acusaron ayer al alcalde Joan Clos de 'dejadez y de no ejercer la autoridad que tiene' para evitar lo ocurrido en el Maremàgnum. Forn ha enviado a Clos una pregunta sobre los expedientes abiertos por el consistorio al bar Caipirinha para que se responda en la comisión de seguridad y movilidad.
Por su parte, el portavoz del Ayuntamiento, Ernest Maragall, acusó al grupo municipal de CiU de 'deslealtad insitucional' y de utilizar la seguridad como elemento de confrontación. Maragall afirmó que el suceso ocurrió en el puerto, una zona cuya gestión depende de la Generalitat.