La Junta propone ahora que se auditen todas las ayudas a ONG

El consejero de Asuntos Sociales, Isaías Pérez Saldaña, recordó ayer que las organizaciones que reciben ayudas públicas superiores a 100 millones de pesetas tienen que presentar una auditoría. No obstante, se mostró a favor de auditar las subvenciones de menor cantidad. 'Lo que ocurre es que eso cuesta dinero. Eso no es gratuito. Por tanto, habrá que montar un programa añadido para ayudar a financiar esas auditorías', advirtió.

El consejero explicó ayer que no retiró las subvenciones a la Federación de Asociaciones Romaníes de Andalucía (FARA) -algunos de cuyos responsables se encuentran en prisión preventiva acusados de blanqueo de dinero, malversación de fondos públicos, amenazas, coacciones e infidelidad en custodia de documentos- para no 'dar pistas' de la actuación de la justicia, con la que, según afirmó, estuvo colaborando de manera coordinada. El consejero se confesó 'tranquilo' por su actuación y la de su departamento. 'Hice las investigaciones que tuve que hacer y colaboré con la justicia. Nos sentimos satisfechos de que si alguno hoy está en la cárcel es gracias a la colaboración de la consejería', dijo Pérez Saldaña, quien rechazó que tuviera responsabilidad en este asunto: 'Cómo podemos ser culpables si hemos sido los que hemos denunciado (...) sólo soy responsable de que algunos estén en la cárcel'.

Asimismo, insistió en que el desvío de fondos no afecta a las subvenciones de 24 millones de pesetas que la consejería concedió a la FARA por el programa de absentismo escolar gitano. 'Lo que investiga la justicia es el blanqueo de una organización dedicada al narcotráfico', dijo.

Ex dirigente

Por su parte, María del Carmen Carrillo, ex dirigente de la Federación de Asociaciones Romaníes de Andalucía hasta 1998, dijo ayer que 'no se sorprende de nada de lo ocurrido'. 'No me gustaron las formas de tomar el poder de los nuevos dirigentes y por eso presenté mi dimisión inmediatamente', añadió Carrillo.

No obstante, María del Carmen Carrillo, que es también la única concejala gitana en una capital de provincia española (pertenece al grupo socialista de Jaén), muestra su preocupación por que este asunto se extienda como una 'mancha negra'.

Carrillo es dirigente de asociaciones de mujeres gitanas y fue, a principios de la década de los noventa, la primera coordinadora de la FARA del programa de apoyo a la escolarización gitana y contra el absentismo. Por eso, ahora, su empeño principal es pedir a la Administración que continúe adelante con este programa.