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Cómo ser feliz y tener éxito editando libros

'Para Jorge Herralde, la felicidad es editar', dijo ayer el secretario de Estado de Cultura, Luis Alberto de Cuenca, quien también afirmó: 'Si bien es posible, desde luego no es deseable la edición sin editores'. 'La edición empieza por la lectura', añadió luego, también citando a Herralde, el veterano editor Francisco Porrúa. En el comedor de gala, la mayor aula del palacio de la Magdalena, no cabía un alfiler. Este año se han batido marcas de asistencia, quizá por el cartel de estrellas de la edición que ha preparado Jorge Herralde. Jóvenes alumnos con deseo de aprender y alumnos aventajados quizá con la misma intención. Tomando notas modestamente o siguiendo con atención las diversas intervenciones, estaban, por ejemplo, Jesús Badenes, director general del Grupo Planeta; Carlos Pascual, de las imprescindibles librerías Marcial Pons; Ofelia Grandes, de Siruela; José María Latorre, que celebra el 25º aniversario de su editorial, o, por citar sólo a algunos, Jordi Nadal, ex Grupo Plaza & Janés y, por tanto, presumiblemente, ex grupo Random House Mondadori, que un día de estos tiene que constituirse si todo va según lo previsto.

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Los ponentes elaboraron una especie de decálogo de la edición que podría titularse Cómo ser feliz y tener éxito editando libros. A ellos, los veteranos, les ha servido, y confían, dijeron, en que pueda ser útil para los demás.

Vocación

Abrió el fuego Javier Pradera. 1. Hay que tener vocación de editor; o sea, organizar el conocimiento para transmitirlo. Después, pueden estar los negocios, la buena vida o la vanidad. 2. El editor tiene que tener una cierta capacidad empresarial para organizar la llamada vocación. 3. Tener un proyecto cultural, aunque sea mínimo. 4. Conocer la demanda actual y futura de la sociedad. 5. Apostar a corto plazo es muy importante, pero también lo es hacerlo a medio y largo plazo. 6. Realizar una labor de prescripción: organizar un catálogo coherente y asociarlo a una marca o un sello para ganar en el futuro la confianza de los lectores. 7. Tener imaginación e inventiva para encontrar el punto entre la oferta y la demanda. 8. Hacer viable la empresa.

Francisco Porrúa transmitió dos consejos que él recibió y tuvo en cuenta: 1. El mejor negocio es un buen libro, prescindiendo de los hoy habituales estudios de mercado. 2. Abrir las ventanas y dejar que entre lo que tiene que entrar. Dejarse guiar por la lectura.

Xavier Folch aportó también su granito de arena, tres en realidad. El primero, de cosecha propia. El editor tiene que estar al día él personalmente o por persona interpuesta de confianza: contar con profesionales que estén al día en los diversos campos del conocimiento y atentos a los cambios o modas que se avecinan. El segundo consejo se lo dio Josep Maria Castellet: 'Si haces bien las cosas, la cuestión es aguantar, y si aguantas, saldrás adelante'. El tercero se lo debe a Jorge Herralde: el editor tiene que estar preparado para cuando llegue la suerte. 'Yo no sabía muy bien a qué se refería, pero luego lo comprendí. Lo entendí muy bien cuando contratamos en catalán El mundo de Sofía y luego la serie de Harry Potter'.

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