Bruselas pide que se retrasen las rebajas de enero por el euro

La Comisión invita a todos los actores económicos a que sigan estos ejemplos para que los ciudadanos de los 12 países que compartirán moneda no sientan que se encuentren en un país extraño cuando se despierten el próximo 1 de enero con el euro ya entre sus manos. Estas recomendaciones están tomadas de entre las acciones más interesantes adoptadas por los Estados miembros para facilitar la llegada física del euro.

Para después de ese día, el ejemplo más llamativo que propone la Comisión Europea es que se retrasen las rebajas de primeros de enero dos semanas, porque son los días comerciales más activos. También aconseja que en los establecimientos comerciales haya personas que asistan a los clientes ante problemas concretos y que las oficinas bancarias abran el 1 de enero.

La comunicación presentada ayer por el comisario europeo de Asuntos Económicos, Pedro Solbes, puso una vez más el punto de atención sobre el escaso estado de preparación de las pyme y en que se intensifiquen las acciones de información a los consumidores. El objetivo de estas buenas prácticas, según Solbes no revolucionarias, es 'poner aceite en los rodajes de la maquinaria de cambio de la moneda'.

Y es que la llegada del euro crea inquietud. Bruselas aconseja que antes del 1 de enero se hagan 10 cosas, como distribuir a los pequeños comercios calculadoras u otros útiles de cálculo para la devolución de monedas, así como para deducir las necesidades de liquidez. También que se distribuyan a los consumidores y a los empleados monedas de euros durante los primeros días de diciembre para que se familiaricen con ellas.

Los próximos meses son decisivos para preparar a ciudadanos, empresas y comerciantes a la nueva moneda común. Bruselas también recomienda que se envíen expertos a los comercios para explicar qué pasará el 1 de enero de 2002 y que se escriba a las empresas para recordarles cuáles son sus obligaciones.