Pujol sostiene que el nacionalismo democrático vasco es "imprescindible" para la paz en Euskadi
La multitudinaria reclamación ciudadana de diálogo expresada el jueves por los asistentes a la manifestación contra ETA en Barcelona fue calificada ayer como "positiva" por el líder de CiU, Jordi Pujol. La coalición que dirige el presidente de la Generalitat ha aplicado siempre una política de apoyo al PNV, que ayer el propio Pujol recordó. "Siempre hemos estado en contra de la criminalización, erosión y marginación del nacionalismo democrático vasco", afirmó. A su juicio, la participación del nacionalismo democrático es un "factor imprescindible" para resolver el problema del terrorismo en el País Vasco. "Es bueno que la petición de diálogo se haya convertido en un clamor general", sentenció.
Coherentes con los planteamientos nacionalistas, Pujol y CiU siempre han declarado su apoyo al PNV, pero al mismo tiempo han subrayado que son los vascos quienes deben resolver sus problemas. Pujol quiso demostrar ayer que este apoyo al PNV no ha sido sólo retórico. Para demostarlo explicó que uno de los motivos que hace dos años llevó a CiU a suscribir "la tan criticada" Declaración de Barcelona con el Bloque Nacionalista Galego y el PNV fue, precisamente, el deseo de expresar esta solidaridad.La Declaración de Barcelona era una forma de defender "la idea de la pluralidad de España", dijo el líder de CiU, pero era también un gesto para "arropar al nacionalismo vasco". Y en contra de la formación de "compartimentos estanco" entre las fuerzas políticas.
Dirigentes de los dos partidos que forman la coalición CiU precisaron a EL PAIS qué contenido político dan a sus peticiones de diálogo cuando se refiere a los problemas que plantea el terrorismo. Los dos dejaron claro que promueven el diálogo entre fuerzas democráticas, con exclusión de los violentos y quienes les apoyan, esto es, de EH.
Preguntados, concretamente, sobre qué entienden por diálogo, con qué objetivo debe plantearse y quiénes deberían ser los interlocutores, los dirigentes nacionalistas respondieron lo siguiente:
- Josep Antoni Duran Lleida: "El diálogo es el único camino, pero no con ETA". El presidente del comité de gobierno de UDC comentó: "Nosotros siempre hemos hecho del diálogo una actitud política. Somos una sociedad plural en la que la gente piensa necesariamente diferente. El diálogo que reclama la sociedad catalana a las fuerzas políticas es el único camino posible para poder avanzar hacia la paz".
Respecto al objetivo dijo: "La gente nos pide que acabemos con ETA, que hablemos entre nosotros y busquemos una solución. No quiere vernos juntos sólo en las manifestaciones después de un cruel asesinato. Quiere vernos juntos buscando soluciones".
Y sobre los interlocutores: "Hace meses que sostengo de manera invariable que el diálogo que se nos reclama no es con ETA. Es el diálogo entre quienes defendemos nuestras ideas, por contrapuestas que sean, mediante la palabra y no por medio de la violencia. Diálogo entre el Gobierno legítimo de España y el legítimo gobierno del País Vasco. Diálogo entre los partidos democráticos dejando al margen a los violentos".
- Artur Mas: "Hay que evitar la fractura que supone el desacuerdo entre partidos". Para el secretario general de Convergència, "el diálogo necesario es entre las fuerzas políticas que defienden la vía democrática y pacífica. Es decir, todas excepto Euskal Herritarrok y su oscuro mundo". El objetivo es "evitar la fractura social que supone el desacuerdo entre los políticos en un asunto tan grave como el terrorismo. Para conseguir el aislamiento social de los terroristas y de quienes les apoyan. Y con el objetivo de conseguir de una vez la paz en Euskadi". Los interlocutores de este diálogo deben ser "todos los partidos democráticos que rechazan la violencia y en especial aquellos que ostentan la responsabilidad de gobierno en España y en Euskadi".
