El Ayuntamiento de Lleida declara la guerra a Fomento para que modifique el trazado del AVE
El Ayuntamiento de Lleida ha declarado la guerra al Ministerio de Fomento y al ente Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF) por el trazado de la línea de ancho europeo por la que circulará el tren de alta velocidad a su paso por el término municipal. El alcalde de la ciudad, el socialista Antoni Siurana, afirmó ayer, con una vehemencia inusual, que el AVE no pasará por Lleida en el año 2002 si los organismos responsables de la obra no modifican algunos aspectos del proyecto inicial.Todos los grupos políticos del consistorio leridano, incluido el PP, aprobaron el pasado viernes por unanimidad una moción en la que se insta a Fomento a introducir cambios significativos en el trazado urbano del AVE. Dos son los objetivos de esta petición: reducir el impacto ambiental que supondrá la construcción de la infraestructura ferroviaria y prevenir que la misma se convierta en una barrera artificial que limite el crecimiento futuro de la capital.
El Ayuntamiento de Lleida reclama, entre otras cosas, el soterramiento de la línea férrea en tres puntos, concretamente en los tramos comprendidos entre el camino de Vallcalent y la avenida del Onze de Setembre, entre la calle de Comtes d'Urgell y la actual estación, y entre los barrios de La Bordeta y Els Magraners. La moción también exige a Fomento que cumpla con lo que se establecía en el documento de declaración de impacto ambiental del by-pass por el que circularán los trenes que vayan directos de Madrid a Barcelona o viceversa. Dicho documento prevé la prolongación del viaducto que cruzará el río Segre para evitar de esa forma que los terraplenes partan por la mitad la huerta de Rufea, donde el consistorio leridano quiere reservar unos terrenos que permitan en el futuro construir otra estación para el AVE.
Pero por lo que parece, Fomento no es partidario de asumir todas las correcciones que proponen los técnicos municipales argumentando que el trazado se aprobó hace tiempo sin que nadie hubiera alegado entonces la necesidad de introducir tales modificaciones. El Ayuntamiento de Lleida calcula que todos estos cambios tendrían un coste adicional de más de 5.000 millones de pesetas, una cantidad que Siurana considera ridícula teniendo en cuenta el elevado importe de la obra y que Fomento, con el actual proyecto, se ahorró la construcción de un segundo túnel urbano y una estación nueva.
La polémica no ha hecho más que empezar. Siurana dijo ayer que si Fomento no modifica el proyecto constructivo del by-pass el tren AVE no pasará por Lleida. "aunque tenga que ir el alcalde en persona a impedirlo". Por su parte, el senador y ex portavoz del grupo municipal de CiU en el consistorio, Josep Varela, ha criticado al equipo de gobierno socialista por no haber presentado las alegaciones oportunas durante la fase de exposición pública del proyecto.
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