Los senegaleses residentes en Cádiz se asocian para defender sus derechos
Medio centenar de senegaleses residentes en la Bahía de Cádiz -donde viven unos 70 inmigrantes de este país africano- han constituido la asociación Touba para defender sus derechos, favorecer la integración y difundir su cultura. Su acción irá encaminada a regularizar y renovar la documentación que precisen y solucionar las dificultades que ponen algunos ayuntamientos para permitir la venta ambulante, actividad a la que se dedica el 98% del colectivo de senegaleses.
Touba (Senegal) es el nombre de la ciudad santa más emblemática para los musulmanes después de La Meca. Con este nombre, l...
Medio centenar de senegaleses residentes en la Bahía de Cádiz -donde viven unos 70 inmigrantes de este país africano- han constituido la asociación Touba para defender sus derechos, favorecer la integración y difundir su cultura. Su acción irá encaminada a regularizar y renovar la documentación que precisen y solucionar las dificultades que ponen algunos ayuntamientos para permitir la venta ambulante, actividad a la que se dedica el 98% del colectivo de senegaleses.
Touba (Senegal) es el nombre de la ciudad santa más emblemática para los musulmanes después de La Meca. Con este nombre, la asociación aspira, además de a solucionar los problemas que más afectan a estos inmigrantes, a alcanzar la integración social, "pero de verdad", según Dame Kante, presidente de la asociación. Otro gran problema es encontrar viviendas de alquiler. A menudo topan con propietarios que se niegan a arrendarles el piso, que ponen trabas al conocer su condición de inmigrantes o que, simplemente, renuncian a la operación ante el riesgo económico que supuestamente comporta. "Es difícil integrarse y convivir en estas circunstancias", explica Kante, que considera que los senegaleses se han concienciado de la importancia de asociarse para defender conjuntamente sus derechos.
Uno de los objetivos de la andadura que comienza Touba, de la mano de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía, es la de estrechar relaciones con todas las instituciones de la Bahía, cuyas intervenciones suelen resultar definitivas para resolver sus problemas.
Uno de los promotores de la asociación, Maniam Lum, se refirió ayer a la existencia de las mafias, una realidad que existe, a su juicio, ante las dificultades legales que ponen las administraciones: "Si África no quiere dar pasaportes, si Europa no da visados, la gente tiene que buscar otras soluciones".
El otro aspecto del trabajo colectivo de Touba, que espera contar con la totalidad de los senegaleses de la zona, se basa en la difusión de su cultura. Esta asociación presentó ayer el quinto festival Stop Racismo, que se celebrará en el Baluarte de la Candelaria el sábado a partir de las 21.00 horas. Actuarán el grupo bereber Tamsna, el senegalés Diengoz, del pueblo wolof, y los gaditanos Bahía Jazz y Ea.