Correos acumula en Alicante medio millón de envíos sin repartir
Los sindicatos de Correos han denunciado que en las oficinas de Alicante hay más de medio millón de paquetes postales almacenados y pendientes de reparto por falta de personal. "Hace dos meses denunciamos una situación similar, ahora se repite y, de cara al verano, si no se adoptan soluciones, el caos está garantizado", comentó ayer Antonio Barbudo, de CC OO.Los sindicatos aseguran que el volumen de correspondencia acumulado en las oficinas de Correos ha aumentado considerablemente a causa del turismo y al incremento de segundas residencias en la zona de playas de la ciudad. "Sin embargo, la plantilla es la misma y, además, las bajas laborales que se producen no se cubren", explicó Vicente Hernández, de UGT. Desde hace tres años, Correos mantiene congelada la convocatoria de empleo público y no contrata a nuevos funcionarios.
Según estimaciones de los sindicatos, serían necesarias 40 nuevas contrataciones de manera inmediata para hacer frente a la avalancha de correspondencia y otras tantas sustituciones temporales para cubrir las bajas por enfermedad de los carteros. Los sindicatos señalan que la mayoría de estas bajas son por motivos de depresión de los empleados debido a las condiciones en las que desarrollan su trabajo. "En Alicante, por ejemplo, en un espacio tremendamente reducido llegan a trabajar más de 60 personas. Esta falta de espacio llega a agobiar a los empleados", dijo Antonio Barbudo.
Privatización
Asimismo, los portavoces de los sindicatos criticaron la "falta de sensibildiad" por parte de la dirección de Correos que, a su juicio, pretende "incrementar el deterioro del servicio para justificar una posible privatización del mismo".
En la actualidad, en la provincia de Alicante hay 1.500 funcionarios de Correos, de los cuales 600 son carteros encargados de los repartos domiciliarios. Los representantes de los trabajadores denunciaron las condiciones "tercermundistas" en la que estos empleados públicos tienen que desarrollar su trabajo. La mayoría de las oficinas locales tienen carencias, tanto en el apartado de medios materiales como en el los recursos humanos. En algunos casos, como por ejemplo los almacenes de la central de reparto carecen de las necesarias medidas de seguridad en caso de incendio. Todas estas carencias ya han sido denunciadas por el comité de empresa a la Inspección de Trabajo.
Los portavoces de los sindicatos anunciaron la convocatoria de movilizaciones en protesta por estas deficiencias del servicio, "si la dirección" no adquiere antes el compromiso de corregirla. Entre las medidas de presión, los sindicatos no descartan la convocatoria de una huelga durante los meses de verano, cuando mayor es la demanda.
