La arqueóloga de Paterna formó parte del tribunal que seleccionó a su hija

La arqueóloga municipal de Paterna (L"Horta Nord), Mercedes Mesquida, formó parte del tribunal que en enero seleccionó a su hija, Mercedes Van De Dorpe, para trabajar en el Museo Municipal de Cerámica. Tras la decisión del tribunal -presidido por el edil de Cultura José Luis Rodrigo, de EU- la Comisión de Gobierno del Ayuntamiento le concedió a la hija de Mesquida el 22 de enero una remuneración de 105.000 pesetas mensuales como beca de investigación en el museo que dirige su madre. Mesquida rehusó hablar del tema. La Ley de Procedimiento de la Administración recoge, como uno de los motivos q...

La arqueóloga municipal de Paterna (L"Horta Nord), Mercedes Mesquida, formó parte del tribunal que en enero seleccionó a su hija, Mercedes Van De Dorpe, para trabajar en el Museo Municipal de Cerámica. Tras la decisión del tribunal -presidido por el edil de Cultura José Luis Rodrigo, de EU- la Comisión de Gobierno del Ayuntamiento le concedió a la hija de Mesquida el 22 de enero una remuneración de 105.000 pesetas mensuales como beca de investigación en el museo que dirige su madre. Mesquida rehusó hablar del tema. La Ley de Procedimiento de la Administración recoge, como uno de los motivos que obligan a los funcionarios a no participar en un proceso de selección, tener un parentesco de consanguineidad de hasta el cuarto grado con algún candidato. Mesquida tiene un parentesco en primer grado con su hija. El reglamento de régimen disciplinario de los funcionarios contempla como falta grave intervenir en un procedimiento administrativo cuando se da una causa de abstención. La arqueóloga está imputada por exigir supuestamente cantidades de dinero a varias empresas costructoras a cambio de agilizar su actuación administrativa: las inspecciones arqueológicas de los terrenos que querían urbanizar. Las constructoras aceptaron pagar estas cantidades, que alcanzan los 12 millones de pesetas, según fuentes de la investigación, pero exigieron unos recibos. Mesquida les entregó supuestamente unos recibos con la supuesta firma de dos ediles de EU: Antonio Laguna y Domingo Rozalén. Cuando fue informada por las constructoras, la Comisión de Gobierno entendió que los hechos eran constitutivos de delito y los puso en conocimiento del juzgado de Instrucción número 3 de Paterna.