Tres candidatos se disputan hoy el liderazgo del PSOE gallego

Más divididos que nunca, los socialistas gallegos tratarán de encontrar en un solo día soluciones a una crisis que dura ya cinco años y que se agudizó tras su estrepitosa derrota en las elecciones autonómicas de 1997. Los 491 delegados al congreso extraordinario que el PSdeG-PSOE celebra hoy en Ourense deberán elegir entre tres candidatos que optan a la secretaría general, vacante desde el pasado mes de junio por la dimisión de Francisco Vázquez, alcalde de A Coruña.

El secretario de organización del PSOE, Ciprià Ciscar, llegó ayer a Galicia con misiones de mediador. Pero su intento de lograr una fusión de las candidaturas parecía condenado al fracaso. Uno de los aspirantes, el vicesecretario general saliente, Miguel Cortizo, ya multiplicó en las últimas semanas las ofertas a su principal adversario, el portavoz del PSdeG en el Parlamento autónomo, Emilio Pérez Touriño, para que se integrara en su lista. A cambio, Cortizo, apoyado por Vázquez, el sempiterno hombre fuerte del socialismo gallego, se comprometía a dejar el camino libre a Pérez Touriño para la nominación como candidato a la Presidencia de la Xunta en 2001.

Los partidarios de Pérez Touriño han ignorado las invitaciones ya que sostienen que una de las causas del hundimiento del partido han sido las "componendas" entre sus dirigentes y que ahora el PSdeG necesita una "renovación a fondo". Touriño regresó a la política gallega hace dos años tras ocupar varios altos cargos en los gobiernos socialistas. Menos contaminado que otros dirigentes en las batallas internas, en un primer momento parecía el favorito para sustituir a Vázquez, pero Cortizo ha ido ganando terreno.

Apoyos heterogéneos

Los apoyos a Cortizo son muy heterogéneos. Desde el aparato de Vázquez hasta la llamada Plataforma Renovadora, muchos de cuyos miembros han lanzado feroces críticas al alcalde coruñés. El tercero en discordia es el exministro Abel Caballero, quien, lejos de arredrarse por su humillante derrota en las autonómicas del año pasado, no duda en proclamarse como "el referente social" del PSdeG. La mayoría de los dirigentes considera que no tiene posibilidad alguna de victoria. Casi todos coinciden en que el resultado será muy ajustado, lo que concede gran importancia a las minorías, especialmente al sector galleguista del exdiputado Ceferino Díaz.