Con las botas puestas
Confusión en la salida. Se confirma la expulsión de dos compañeros. Nos sentimos tristes. Ánimo. Bajo el acueducto de Segovia preparamos los últimos detalles para la etapa decisiva. Estamos seguros de dar un vuelco a la general. Las previsiones metereológicas son malas. Nos aprovisionamos de chubasqueros, guantes y vestimenta de invierno.¿Quién atacará, cuando y dónde? Festina quiere poner la hora a punto. Félix García es el elegido. Nos abrochamos el cinturón. Empieza el baile. El frío es intenso. Nuestros rostros lucen desencajados. Ahora mismo quisiera ser periodista. Virenque y Leaniz se van como motos. Alex ataca con fuerza y convencido de ganar. A Zülle se le nota su condición de jefe en los momentos en que hay que dar la cara.
Pasan los kilómetros. La desilusión se apodera de nosotros. El Banesto consigue alcanzar a Zülle. Se pierden las opciones.Hemos luchado para conseguir la victoria. Sabíamos que podíamos hacerlo. No ha sido posible. Otro año será. Hemos muerto con las botas puestas. Por mi parte, estoy satisfecho de mi trabajo.
