González excluirá a los líderes regionales de la nueva ejecutiva del PSOE

La presión de algunos secretarios regionales y presidentes socialistas de comunidades autónomas para estar en la ejecutiva que, salga del congreso de junio está abocada, de momento, al fracaso. La intención de Felipe González, secretario general del PSOE, es que los miembros de la ejecutiva tengan dedicación completa a la dirección del partido. Esto inhabilita a quienes tengan puestos relevantes orgánicos o institucionales. Un Consejo Político de nuevo cuño será el órgano en el que tengan cobijo estos altos cargos. En los últimos días los barones del PSOE, casi siempre por personas inte...

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La presión de algunos secretarios regionales y presidentes socialistas de comunidades autónomas para estar en la ejecutiva que, salga del congreso de junio está abocada, de momento, al fracaso. La intención de Felipe González, secretario general del PSOE, es que los miembros de la ejecutiva tengan dedicación completa a la dirección del partido. Esto inhabilita a quienes tengan puestos relevantes orgánicos o institucionales. Un Consejo Político de nuevo cuño será el órgano en el que tengan cobijo estos altos cargos. En los últimos días los barones del PSOE, casi siempre por personas interpuestas, han expresado su deseo de estar en la ejecutiva y no en ese órgano nuevo de debate político que se reunirá con una periodicidad mensual.

De momento, según las fuentes consultadas, esos criterios no están haciendo mella en Felipe González, que sigue con la idea de que la nueva ejecutiva sea "pequeña, ágil y operativa". En declaraciones públicas hace muestras de no tener preferencias por personas escudándose en el clásico "lo que los compañeros decidan en el Congreso". Aunque no da nombres propios ni en privado ni en público sí ha sugerido criterios claros.

El primero es el de la exclusividad. Todos los que estén deben dedicarse al completo, es decir, acudir a diario a un despacho de la calle madrileña de Ferraz, según aseguran personas del entorno de González. Con esta pretensión quedarán excluidos de la ejecutiva aquellos dirigentes del partido que tienen altas responsabilidades.

Las fuentes informantes citan como "incompatibles" al primer secretario de los socialistas catalanes, Narcís Serra; al presidente de Andalucía, Manuel Chaves; al presidente castellano-manchego, José Bono; al secretario de los socialistas valencianos, Joan Lerma; al presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, o al secretario de los socialistas asturianos, Luis Martínez Noval.

La decepción está empezando a aflorar entre algunos relevantes socialistas que tenían aspiraciones a entrar en la nueva ejecutiva. En estos momentos corre como la pólvora en las filas socialistas la información de que hay "cuatro criterios" para formar la ejecutiva expresados por González a muy pocas personas. El primero sería el corte numérico de 36 a 18. Después la entrada de un 40% de mujeres. El tercer criterio es el de la incorporación de personas de unos 30 años. Por último, la mitad deben ser nuevos.

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