'Narcos', secuestradores y sanguinarios

La redada internacional culminada en España, Italia y Holanda ha supuesto un duro golpe para una de las 150 familias que integran la N'Dranghetha, una sanguinaria banda mafiosa asentada en Calabria, una región italiana poblada por dos millones de personas. Sus principales actividades son el narcotráfico, los secuestros y el tráfico de armas.La operación policial confirma las ramificaciones internacionales de los clanes mafiosos y su implantación en el litoral mediterráneo español y, sobre todo, en la Costa del Sol. Marbella vuelve a a parecer como base de operaciones de las redes del narcotráfico: el mafioso Vittorio di Fazzio, con antecedentes en España por tráfico de drogas y secuestro, dirigía desde esta ciudad la distribución de grandes alijos de hachis hacia Italia, Francia, Gran Bretaña y la antigua Yugoslavia.

La Policía Judicial llegó hasta los tres jefes mafiosos detenidos en Madrid siguiendo el rastro de Luigi Molinetti, que entró en España a través de la frontera gerundense de Port Bou. Tras llegar por vía férrea a la estación de Chamartín, se dirigió a un hotel próximo a la plaza de Castilla, donde se reunió con Giovanni Puntorieri y el supercapo Domenico Paviglianiti.

Los tres delincuentes calabreses tienen las manos manchadas de sangre. A Puntorieri se le supone autor o inductor de una treintena de crímenes, entre ellos uno de los más repugnantes de la N'Drangheta: el homicidio de Letterio Nattuno, un joven de 16 años, al que su asesino atravesó la garganta con un palo antes de sepultar el cadáver en cal viva.