El anuncio que el servicio militar será suprimido dispara el numero de objetores

El numero de objetores de conciencia, que se estabilizó a principios del año pasado, ha vuelto a dispararse en los últimos meses, especialmente a raíz del anuncio, a mediados de abril, de que el PP y CiU habían llegado a un acuerdo para suprimir la mili.Entre enero y mayo de este año, 36.347 jóvenes presentaron la solicitud correspondiente ante el Consejo Nacional de Objeción de Conciencia, lo que supone un aumento del 50% respecto al mismo periodo de 1995.

Durante los últimos 12 meses, el número de nuevos objetores ha superado los 80.000. En mayo las solicitudes ascendieron a 9,414, la cifra más alta de los últimos dos años y la segunda de la historia, tras el récord de marzo de 1994, cuando el Gobierno anunció que endurecería la prestación sustitutoria.

De agosto de 1994 a mayo de 1995, el número de objetores se redujo cada mes, lo que hizo creer que este espectacular fenómeno, sin parangón en Europa, había tocado techo. De hecho, el año pasado acabó por vez primera. con una ligera reducción, del 5,5%, en las solicitudes.

Sin embargo, la tendencia se invirtió ya en junio de 1995 y desde entonces el crecimiento ha sido continuo e imparable.

Periodo de transición

El efecto inmediato que ha tenido sobre la objeción el mero anuncio de que la mili será suprimida demuestra las dificultades que entrañará el tránsito del Ejército actual a uno profesional. El problema estriba en que, durante el periodo de transición, habrá que asegurar que sigue haciendo la mili un contingente suficiente de jóvenes, lo que resultará sumamente problemático si continúa aumentando el porcentaje de objetores.Precisamente ayer el portavoz del Grupo Catalán en el Congreso, Joaquim Molins; el secretario del Popular, Gabriel Cisneros, y el portavoz del PP en el Senado, Pío García Escudero, presentaron públicamente la proposición no de ley suscrita por ambos grupos para que se cree una Comisión Mixta de ambas Cámaras encargada de estudiar la supresión del servicio militar.

La comisión, que se constituirá antes del verano y acabará sus trabajos en un año, fijará "la fórmula y los plazos" para profesionalizar totalmente el Ejército español en el horizonte del año 2001, "siempre y cuando lo permitan las necesidades presupuestarias y las exigencias de la defensa".

Cisneros explicó que la promesa electoral del PP de reducir de nueve a seis meses la duración de la mili durante esta legislatura se subordina al pacto alcanzado con CiU para profesionalizar las Fuerzas Armadas, por lo que su puesta en práctica dependerá de las conclusiones de la comisión y no se aplicará antes de que ésta acabe sus trabajos.

Bien distinta es la actitud del Grupo Catalán, que esta semana ha presentado una proposión de ley para modificar la legislación sobre objeción de conciencia.

Molins dijo que la iniciativa de CiU es idéntica a la que presentó en la anterior legislatura mientras que Cisneros negó que la propuesta del Grupo Catalán constituya una deslealtad, pues el pacto entre ambas formaciones no aludía a este asunto. Se da la circunstancia de que la igualación de la mili y la prestación de los objetores cuenta con mayoría suficiente para ser aprobada, aunque el PP se opone a ella.

Por su parte, José María Michavila, secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, expresó anoche la satisfacción del presidente, José María Aznar, por la inminente constitución de la comisión de estudio, cuya creación estaba incluida en su discurso de investidura, y la disposición del Gobierno a colaborar con la misma para que pueda concluir sus trabajos en el plazo de un año que se ha fijado.