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Danuta Walesa, dispuesta a "repartir leche" para dar de comer a su familia

"Dan ganas de llorar por el hecho de que en Polonia un ex presidente no pueda tener un sueldo", afirma la mujer de Lech Walesa en una entrevista publicada ayer por el diario Kurier Polski. Danuta Walesa, que comenta de esta manera el retorno de su marido al trabajo en los astilleros de Gdansk, declaró asimismo que está dispuesta a "repartir leche" porque el salario de su marido (unas 30.000 pesetas) no alcanza para cubrir los gastos de una matrimonio con ocho hijos.El vicepresidente del Parlamento polaco, el socialdemócrata Marek Borowski, declaró ayer, mientras tanto, que la Dieta (Parlamento) promulgará después de Semana Santa una ley que otorgará a los ex presidentes un sueldo que corresponderá a la mitad de lo que gana el actual jefe del Estado. Borowski calificó la vuelta de Walesa al trabajo de "gesto político".

Los problemas económicos de los Walesa comenzaron en diciembre pasado cuando el fisco reclamó al ex presidente unos 500.000 dólares (62 millones de pesetas) por impuestos sobre la cantidad recibida por Walesa en 1980 de la productora norteamericana Warner Bros, que pensaba realizar una película sobre el líder obrero. El filme nunca se rodó, pero Walesa cobró el dinero. Afirma que no pagó el impuesto porque no se trataba de un honorario sino de un "donativo" libre de cargas fiscales.

Para garantizar el pago de la deuda atrasada, el fisco polaco bloqueó las cuentas de Walesa y la hipoteca de su casa privada en Gdansk. Así, tras la derrota en las presidenciales del pasado mes de noviembre, Walesa siguió cobrando su sueldo sólo hasta el pasado mes de marzo. Ahora declara estar sin medios de supervivencia.

Danuta Walesa afirma que está "desesperada" y dispuesta a "buscar cualquier trabajo". "Puedo, incluso, repartir leche", afirma en la citada entrevista. La mujer del famoso electricista reconoce, sin embargo, que están a punto de comenzar las obras de una nueva casa.

Problemas de familia

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Los problemas de los Walesa no son, sin embargo, sólo de índole económica. La vida de los hijos del ex presidente está plagada de incidentes. Slawek, de 24 años, tuvo dos accidentes de coche que provocó en estado de ebriedad. Otro hijo, Przemek de 22 años, también tuvo un accidente hace dos años cuando conducía igualmente borracho. La policía intentó detenerle y reaccionó insultando y pegando a los agentes del orden. '

Las hijas, para suerte de los padres, no crean problemas. La mayor de ellas Magda, de 17 años, frecuenta una escuela de ballet y, según los entendidos, tiene talento. Ana y María Victoria, de 16 y 14 años, respectivamente, aprenden en una escuela de especialidad deportiva. Ana se especializa en esgrima y María Victoria en equitación. La más pequeña, Brígida, va a una escuela de músicá.

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