El socialista Obiols añora la 'operación Roca'
El primer secretario del PSC y miembro de la ejecutiva del PSOE, Raimon Obiols, afirmó ayer que es malo para España, Cataluña y la propia CiU que la coalición nacionalista se vea condenada a hacer de partido bisagra. En su opinión, en el horizonte cercano no se ve ningún partido que pueda volver a obterner la mayoría absoluta y "fatalmente" unos y otros deberán pasar por la "ventanilla del señor Pujol".CiU es una coalición "moderada, seria y respetable" pero debe atender sus intereses nacionalistas, lo que provoca que unos y otros acaben por acusarla de mercantilistas, señaló Obiols. Otra cosa sería, agregó, si en España existiera un partido reformista, de centro, que pudiera actuar de bisagra. "A Miquel Roca debería levantársele un monumento", según el dirigente del PSC, porque en 1986 lo vio claro con su operación reformista, pero "la hizo a destiempo y mal" organizada.
Obiols desautorizó, en cambio, a quienes desde sus propias filas ponen el carro delante de los bueyes y alertan del peligro que corre la cohesión del Estado si el PP hace concesiones a CiU, sin esperar a ver qué resulta del hipotético acuerdo.Ayer mismo, el ministro Josep Borrell se sumó a Alfonso Guerra, Juan Carlos Rodríguez Ibarra y Manuel Chaves en la denuncia del peligro y advirtió que el PSOE "estará vigilante".
El secretario general de CDC, Pere Esteve, respondió ayer a tales declaraciones: "Es lamentable que [los socialistas] caigan tan pronto en los mismos defectos que tanto criticaron del PP".
