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Guasa escénica, realidad política

Una encuesta revela que los espectadores de Els Joglars ven en la caricatura de Pujol a los gobernantes

No han conseguido cambiar la intención de voto de su público, pero han logrado que los espectadores vean parodiada a toda la clase política en su montaje escénico. El grupo teatral catalán Els Joglars, conocido por su buen oficio escénico e interpretativo y su capacidad de pitorrearse de todos los poderes (político, religioso, militar, monárquico ... ), acaba de aterrizar en el teatro Nuevo Apolo de Madrid con su última, irónica y mordaz guasa: Ubú President, un espectáculo en el que en el protagonista, El Excels, se reconoce fácilmente a Jordi Pujol, presidente de la Generalitat de Cataluña.El análisis que sobre esta figura hace el director teatral Albert Boadella consigue no sólo las carcajadas del público sino que muchos espectadores reconozcan en el líder de CiU actitudes y modos comunes a todos los políticos, a los que consideran, cuando están en campaña, con muchas más dotes interpretativas que las de los propios actores profesionales.

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Estas conclusiones son las que se desprenden de un cuestionario formulado por EL PAÍS a el público que acudió la pasada noche del viernes a la representación de Ubú President.

De 674 espectadores a los que se entregó el cuestionario, un total de 106 lo entregaron a la salida de la función debidamente cumplimentado, y otras 42 personas se molestaron en devolverlo, aunque en blanco. Los reacios a responder al formulario alegaban varias razones para no hacerlo. Unos afirmaban que estaban hartos de recibir propaganda electoral: "¡Más no, por favor, estamos saturados!"; otros al ver el membrete de este diario rehusaron aceptar el documento con cara de pocos amigos; hubo alguno que afirmó que ya estaba mayorcito para dudar o cambiar sus opiniones políticas. También hubo problemas de infraestructura para aquellos que no llevaban bolígrafo y rechazaban la idea de "hacer cola" para utilizar los que se prestaban al público.

La gran mayoría aceptaba amablemente el cuestionario, aunque muchos pensaban que lo que se les ofrecía era el programa de mano del espectáculo que iban a ver. También fue una gran mayoría la que a la salida de la representación se olvidó de entregar el documento cumplimentado. Entre éstos, muchos salían apresurados para pillar taxi antes que nadie, (era la una de la madrugada), los jovenes pasaban del asunto y otros, en un alarde de amabilidad y confianza, decían a las periodistas encargadas de la recogida: "Pongan ustedes lo que les parezca, que estaremos de acuerdo".

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En esta ocasión, los hombres fueron más lanzados a la hora de contestar el cuestionario. 49 varones entregaron Ja encuesta con todos sus datos frente a 36 mujeres. En ambos sexos, la práctica totalidad eran de profesiones liberales. Hubo un grupo de 20 personas que decidieron no revelar su sexo, edad y profesión, pero no pusieron reparos a la hora de contestar todas las preguntas. Los resultados muestran que el público ve en Ubú President reflejada a toda la clase política, tal y como refleja el siguiente contenido.

¿Ver Ubú President le ha hecho cambiar la intención de voto? Por la opinión de la inmensa mayoría del público del viernes, Els Joglars no ha conseguido alterar las opciones electorales de sus espectadores. Mujeres: todas contestaron con un "nada", menos una profesora de 38 años que confesó que este espectácule había alterado "bastante" su voto. Hombres: dos jóvenes de 22 y 25 años declararon que tras la función su voto había variado "bastante", a otro de 35 le había variado "mucho". Para el resto, la papeleta con la que votará hoy seguía siendo la misma. Sin sexo, edad o profesión: a ninguno le alteró su intención de voto el montaje.

¿Cree que en general los componentes de la clase política tienen parecido con el protagonisa de la obra?

Pujol puede respirar tranquilo. No es el único parodiado en la obra, según la opinión de los es pectadores del pasado viernes. Mujeres: nueve mujeres encontraron "mucho" parecido entre El Excels de Els Joglars y el resto de los políticos. Para 17 era "bastante" el parecido, y otras 10 sólo vieron "algún" parecido. Hombres: en su mayoría. encontraron "bastante" parecido entre el protagonista de la obra y los políticos (25 en total). 13 pensa ron que el parecido era "mucho". Tan sólo para cuatro no había ningún parecido. Sin sexo, edad o profesión: se repiten las opiniones, cuatro dijeron que se parecen "mucho", ocho que "bastante" y otros ocho que "algo".

¿Piensa que el humor y la caricatura es el mejor metodo para invitar al análisis y la reflexión sobre la clase política?

En esta cuestión, menos uno, todos (mujeres, hombres y los indefinidos), coninciden en señalar que no hay nada mejor que el cachondeo y el sentido del humor para diseccionar a la clase política. Como curiosidad sólo señalar que la excepción viene de la mano de un político de 35 años, que se niega a admitir la más mínima guasa para analizarle a él o a sus colegas. Por otro lado este mismo encuestado es uno de los pocos a los que este espectáculo le ha hecho cambiar "mucho" su intención de voto.¿A su juicio quién hace más teatro, los protagonistas de esta obra o los políticos en campaña? Una de las sorpresas de esta encuesta: los espectadores consideran que los políticos le dan mucho más al arte de Talía que los propios actores. 30 mujeres, 33 hombres y 17 sin sexo, edad o profesión, se han fijado en las, grandes dotes dramáticas de los políticos a la hora de pedir el voto. El resto han sido piadosos con los cómicos de profesión y consideran que. son éstos los que hacen verdadero teatro.

¿Cree que lo que cuenta Ubú President se reproduce esencialmente en la cotidianidad de los Gobiernos (central, autonómico, municipal)?

Asistiendo a una representación de Ubú President se podría concluir que las carcajadas que surgen continuamente del público se deben al efecto producido por una parodia disparatada que sólo existe en el espíritu gamberro de Boadella. Pues no.

La encuesta ha revelado que el desternille de los espectadores se debe, mayoritariamente, a que sobre el escenario ven un retrato bastante fiel del día a día de las instituciones públicas. 28 mujeres, 36 hombres y 14 sin profesión, edad, ni sexo contestaron afirmativamente a esta pregunta. Sólo ocho mujeres, trece hombres y seis indefinidos pensaron que Els, Joglars exagera y aquello es sólo teatro.

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