Una incógnita que impide hacer planes

El grado de implantación del primer curso de la ESO en Galicia a partir del próximo año es todavía una incógnita. El Gobierno autónomo del Partido Popular, reconoce que, de momento, carece de previsiones concretas a la espera de analizar los resultados de un estudio que ha encargado sobre esta cuestión. "Hasta dentro de dos meses, cuando examinemos el informe, no se puede adelantar nada", indicó un portavoz de la Consejería de Educación.Los sindicatos de profesores y la oposición, política han acusado con frecuencia a la Xunta de retrasar deliberadamente la implantación de la reforma. El consejero de Educación, Juan Piñeiro, rechaza con energía ese reproche, aunque admite que, personalmente, está en desacuerdo con aspectos importantes de la LOGSE, y se queja de la escasa dotación prespuestaria del ministerio para aplicarla. Por el momento se desconoce el número de alumnos y profesores a los que afectará el cambio.