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PAZ EN LOS BALCANES

Fría acogida en EE UU al plan de Clinton de enviar soldados

El escepticismo y la cautela dominaron las primeras reacciones de la opinión pública norteamericana y de los dirigentes del Congreso ante el llamamiento televisado que el presidente Bill Ciinton lanzó el lunes por la noche para justificar la necesidad de enviar 20.000 soldados a Bosnia. Desde el despacho oval de la Casa Blanca, Clinton planteó el despliegue como una obligación moral y política, y afirmó que EE UU tiene la responsabilidad de dirigir: "No Podemos y no debemos ser el policía del mundo. No podemos parar todas las guerras, pero sí algunas. No podemos salvar á todos los niños y mujeres, pero sí a muchos. No podemos hacer todo; pero en este caso debemos hacer todo lo que podamos". Clinton advirtió que la misión tiene riesgos. y que puede haber bajas, y amenazó a los que pongan en peligro la seguridad dé los soldados.El presidente se reunió ayer antes de partir hacia Europa con los dirigentes republicanos y demócratas de las dos Cámaras, que también recibieron del general John Shalikashvili, jefe del Estado Mayor, información detallada so bre la operación militar. Los deba tes parlamentarios se abrieron en el Senado con las declaraciones del general Brent Scowcroft, asesor de seguridad de George Bush, que colocó el prestigio y la responsabilidad de Estados Unidos por encima de los riesgos de la misión: "La posibilidad de que haya reveses significativos, incluso desastrosos, es bastante alta, pero creo que el desastre sería absolutamente seguro,si damos la espalda. Sería una catástrofe para la fiabilidad de Estados Unidos".

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Clinton, como todos los presidentes, interpreta que la Constitución le autoriza a enviar tropas al extranjero, aunque el procedimiento completo - requiere la cooperación de la Casa Blanca y el Congreso. En todo caso, por razones políticas y electorales, prefiere obtener el respaldo de las Cámaras, y tanto Robert Dole, líder del Senado, como Newt Gingrich, presidente de la Cámara de Representantes, dieron a entender ayer que no se opondrán a la petición siempre que el presidente ofrezca las explicaciones pertinentes.

Dole, electoralista

Dole adoptó una postura oportunista, que refleja sus preocupaciones como candidato electoral, aunque su intención conciliadora fue evidente: "Necesitamos encontrar la forma de respaldar al presidente, y creo que vamos a esperar a ver cómo reaccionan los norteamericanos, pero Clinton es el comandante en jefe y, si expone el asunto en su totalidad, debería contar con nuestro apoyo".Los primeros sondeos fueron contradictorios. El de Gallup para la CNN y USA Today arrojó un 46% a favor del envío de tropas y un 40% en contra. La encuesta de ABC y The Washington Post concluyó que todavía hay un 57% que se opone al envío de los soldados, un resultado prácticamente igual al 58% de la CBS.

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