Las ONG piden a la ONU que retire su acreditación de Estado al Vaticano

Once grandes agrupaciones de Organizaciones No Gubernamentales iniciaron ayer una campaña para que el Vaticano deje de participar en la ONU como un Estado. "Urgimos a la ONU, al secretario general y a los Estados miembros a que revisen lo inadecuado que es permitir a la Santa Sede, una entidad religiosa, actuar a la par con Estados de las Naciones Unidas", dicen estas organizaciones, que provienen de Estados Unidos, Chile y Europa e incluye la llamada Católicos por la Libre Elección, de Washington (EE UU).Según el comunicado elaborado conjuntamente en el foro alternativo de ONG por, estas agrupaciones, el Vaticano, que opera en la ONU -como un Estado no-miembro observador permanente, debería cambiar su estatus y convertirse casi en una ONG, aunque ellos lo llaman una institución no gubernamental".

Con ese nuevo estatus, dicen las ONG, el Vaticano sería bien recibido en su foro. "Reconocemos la contribución de todas estas instituciones y damos la bienvenida a la participación de las voces religiosas", pero "ninguna religión debe disfrutar de mayor privilegio que ninguna otra entidad no gubernamental", afirman. Para estas organizaciones, la participación del Vaticano en las Naciones Unidas tiene unos efectos negativos en su constante intento de introducir las posiciones teológicas de la Iglesia católica.

En este mismo sentido se pronunció ayer el ex ministro francés de Cultura, el socialista Jack Lang, que forma parte del comité de 21 asesores, creado por el secretario general de la ONU, Butros Gali. "Como jurista que soy, no deja de sorprenderme la presencia continuada de la Santa Sede en este tipo de reuniones, a las que además acude con posturas más fuertes e intransigentes que los propios Estados", declaró en una conferencia de prensa, informa Efe.

Para el portavoz del Vaticano, Joaquín Navarro Valls, el debate sobre el, derecho de la Santa Sede a participar o no en reuniones de Estado se plantea un poco tarde, "exactamente con 11 siglos de retraso" , el tiempo transcurrido desde que los países que forman la comunidad internacional decidieron intercambiar embajadores con Roma.

La portavoz de la Conferencia, la francesa Therese Gastaut, afirmó que la Santa Sede es un Estado, y, como tal, goza, al igual que Suiza, del estatuto de observador en la ONU. Gastaut precisó que en la Carta de las Naciones Unidas existe una cláusula que permite a sus Estados miembros participar, con derecho a voto, en todos los acontecimientos de Estado.