Le compro la farmacia
En relación con la carta publicada en su periódico con fecha 15 de febrero de 1994, remitida por el señor Jaime Giner Martínez, de Señera, Valencia, le agradecería publicara lo siguiente.Puesto que me atrevo a suponer, casi con total seguridad, que la señora ministra de Sanidad no va a socializar su oficina de farmacia, adquiriéndola al precio de una peseta, a cambio de un puesto como farmacéutico en la Administración (no especifica si estatal o autonómica), tengo a bien manifestarle mi disponibilidad a adquirir a, ese precio (una peseta) su oficina de farmacia. Le ofrezco, como usted desea, un puesto en la Administración: inspectora farmacéutica municipal (Cuerpo de Farmacéuticos Titulares), en Torremolinos, Málaga, que desde hace cinco años vengo desempeñando con carácter interino. De acceder a mi oferta, he de advertirle que podría salir malparada económicamente. Me explico: en primer lugar, no he conseguido la apertura de una oficina de farmacia, tal como hasta ahora había sido conditio sine qua non para el ejercicio de la función que desempeño. En segundo lugar, mi sueldo neto es de 96.233 pesetas (grupo A y, extrañamente, nivel 11). No obstante, creo que sabría conformarme con las ganancias de su. oficina de farmacia (calculo bastante superiores a mi sueldo).
Finalmente, permítame decirle que, a pesar de todo, me conformo con lo que tengo, dado el nivel de paro existente en la profesión y las facilidades que tenemos para la apertura de nuevas oficinas de farmacia.-