No soy censor
En la sección de Radio y Televisión del día 20, dentro de un reportaje sobre la censura cinematográfica durante el franquismo (página 47), se me cita como censor, lo que no es cierto, en relación con una deliciosa anécdota a propósito de Marilyn Monroe (como recuerdo bien se trataba de la película Niágara).
Fui vocal de la Junta de Clasificación y Censura dependiente de la Dirección General de Cinematografía y Teatro, pero mi función, junto a mis compañeros de la misma rama, estribaba en clasificar las películas, no en censurarlas, tarea de la otra rama, a efectos de otorgar las correspondientes subvenciones, si se trataba de películas españolas conforme a la categoría que obtenían, o a efectos del correspondiente canon por derechos arancelarios por derechos de importación si eran películas extranjeras.
Dicho sea en honor al rigor histórico. Ni tampoco fui director general, sino sencillamente director entre los años 1953 y 1962.-