El Banesto correrá la Vuelta sin Induráin

El Consejo Superior de Deportes (CSD) utilizó ayer su política persuasiva y forzó un acuerdo en el conflicto que enfrentaba a Unipublic y al Banesto. Este equipo correrá la Vuelta sin Miguel Induráin -algo a lo que se oponía Unipublic-, mientras que el Banesto se compromete a alinear al navarro en la Vuelta de 1995 -una obligación contraria a los principios del director del equipo, José Miguel Echávarri-. Rafael Cortés Elvira, secretario de Estado para el Deporte, apeló al interés nacional como fuerza motriz del compromiso.

La figura de Induráin ha sido la piedra de toque del acuerdo, pero el mejor ciclista del mundo no estaba al tanto de los términos de la negociación, según Echávarri. El corredor ve, en cierta forma, hipotecada su próxima temporada, algo que no le había ocurrido hasta ahora en su carrera, en la que ha ganado tres Tour y dos Giros.Ni Unipublic ni el CSD tenían ningún sentimiento de culpa por este acuerdo. Todo lo contrario. "Es lo mejor para el ciclismo español", recalcó Cortés. "No ha habido ni vencedores ni vencidos", repitió Enrique Franco, director de la empresa organizadora de la Vuelta. El acuerdo fue firmado por el propio Franco y por Francisco Teba, secretario general de la Agrupación Deportiva Banesto.

Detrás de las palabras bonitas, sin embargo, los analistas creen entrever algo diferente: la cláusula del 60% le ha valido a Unipublic, por lo menos, conseguir lo que ya tenía los pasados años -la participación de todos los equipos españoles en la Vuelta- y algo más: romper la combativa asociación de equipos e imponer los términos de la negociación, amén de influir en la planificación deportiva del mejor deportista español de la historia.

Nadie quiso ayer hacerse responsable de las posibles consecuencias del acuerdo, nadie quiso decir quien había sido el autor material del texto firmado. Cortés se arrogó la representación de los aficionados españoles cuando afirmó : "Todos los españoles quieren que Induráin corra y gane la Vuelta a España". Franco llevó más allá el argumento cuando dijo: "Lo que es bueno para la Vuelta es bueno para el ciclismo español". Sin embargo, una de las opiniones más extendidas entre los aficionados es que más vale un Tour que una Vuelta.

Echávarri estuvo bastante callado en la conferencia de prensa posterior a la firma. Se cuidó en remarcar que él no se había comprometido a que Induráin corriera la Vuelta de 1995, que era una decisión del patrocinador -Banesto-, que todavía quedaba mucho tiempo para poder hablar del calendario de entonces y que había que preguntarle al propio Induráin. El ciclista no quiso dar su opinión a este periódico.