Bajo sospecha

JUANMA ITURRIAGA, El Madrid se encuentra bajo sospecha. Todo está en entredicho. Pasado, presente y futuro. Entrenador y jugadores. ¿Exagerado, catastrofista? Nada de eso. El equipo blanco se juega esta tarde ante el Estudiantes (18.00, La 2) mucho más que un billete para la final. Pone sobre el tapete su crédito deportivo y social, hasta el partido de Limoges ilimitado y ahora cercano a ser retirado después de sus dos derrotas consecutivas frente a los colegiales.

El Madrid de Sabonis estaba llamado a ganarlo todo y corre el peligro de quedarse sin nada. Después de una temporada exito...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

JUANMA ITURRIAGA, El Madrid se encuentra bajo sospecha. Todo está en entredicho. Pasado, presente y futuro. Entrenador y jugadores. ¿Exagerado, catastrofista? Nada de eso. El equipo blanco se juega esta tarde ante el Estudiantes (18.00, La 2) mucho más que un billete para la final. Pone sobre el tapete su crédito deportivo y social, hasta el partido de Limoges ilimitado y ahora cercano a ser retirado después de sus dos derrotas consecutivas frente a los colegiales.

El Madrid de Sabonis estaba llamado a ganarlo todo y corre el peligro de quedarse sin nada. Después de una temporada exitosa en términos generales, el poderoso tanque blanco chirría como si fuese un seiscientos. La derrota ante el Limoges se trató en cierta manera como un accidente. Para su desgracia, los últimos acontecimientos la están reconvirtiendo en un aviso premonitorio. Todo lo malo que se vio en Atenas se está repitiendo. Falta de carácter, Sabonis-dependencia enfermiza, dirección errática dentro de la cancha y desde el banquillo, tendencia a la autodestrucción.

Hace unos años, el Madrid y el Barcelona se jugaban la Liga en el último partido. Mirza Delibasic era la gran estrella madridista. Preguntado por la gran responsabilidad que pesaba sobre su persona, contestó: "A mí no me han fichado para ganar a La Salle Bonanova. Yo he venido para jugar estos partidos". Delibasic fue la gran figura del partido y el Madrid ganó. La gran duda reside en si este Madrid está preparado para saber disputar encuentros en que se lucha tanto contra el otro equipo como contra los propios nervios.

Mientras tanto, el Estudiantes se halla ante su oportunidad soñada. Adversario, el que más le motiva. Hace menos de una semana estaba deshauciado. La serie lleva una dinámica en la que cada vez se juega menos, se pelea más y domina la heterodoxia, terreno en el que es un maestro. La influencia de Sabonis disminuye. El éxtasis y la Liga Europea están a sólo 40 minutos, aunque seguro que el simple hecho de volver a ser el primer equipo de Madrid es suficiente recompensa.

Archivado En