El PSOE, dispuesto a aprobar la reforma de las Cámaras sin contar con el Partido Popular

El PSOE ha decidido aprobar la reforma de los reglamentos del Congreso y del Senado antes de que termine la actual legislatura, aunque no cuente con el apoyo del Partido Popular. Los actuales reglamentos son fruto del acuerdo de todods los grupos, ya que se estima que esta norma forma parte del bloque constitucional y que no debe utilizarse como arma política. El PP se ha reetirado de las reuniones del Congreso, y los trabajos en el Senado quedaron bloqueados esta semana por su oposición a que puedan utilizarse todas las lenguas del Estado en la Comisión General de Autonomías.

El portav...

El PSOE ha decidido aprobar la reforma de los reglamentos del Congreso y del Senado antes de que termine la actual legislatura, aunque no cuente con el apoyo del Partido Popular. Los actuales reglamentos son fruto del acuerdo de todods los grupos, ya que se estima que esta norma forma parte del bloque constitucional y que no debe utilizarse como arma política. El PP se ha reetirado de las reuniones del Congreso, y los trabajos en el Senado quedaron bloqueados esta semana por su oposición a que puedan utilizarse todas las lenguas del Estado en la Comisión General de Autonomías.

El portavoz del PP en el Senado, José Míguel Ortí Bordás, recuerda a los socialistas que la "regla de oro del parlamentarismo es establecer sus normas de juego por consenso, y, por tanto, todos tienen que ceder".La lucha sin cuartel entre el PSOE y el PP no deja resquicios y también ha alcanzado a las reformas del reglamento del Congreso y del Senado. En estos casos, el resto de los grupos de la oposición han reaccionado airadamente contra los populares y han mostrado su disposición a firmar con los socialistas sendas proposiciones de ley para que dichas reformas se produzcan antes de que termine la legislatura. Izquierda Unida también mantiene dudas sobre si apoyar la reforma.

Cambio de opinión

Los socialistas habían mantenido la tesis hasta hace pocos meses de que no podían llevar adelante las reformas de estos reglamentos, que dirigen la vida de las Cámaras política y técnicamente, sin el apoyo mayoritario y, sobre todo, sin el concurso del primer grupo de la oposición. En las últimas semanas han cambiado de opinión y están dispuestos a aprobarlas con el. argumento de que para el PP "la legislatura está terminada y su respuesta será negativa en todos los asuntos por muy institucionales que sean", según un dirigente socialista.

El PP se ha retirado de los trabajos del Congreso por estimar -que el PSOE no permite que se produzca un control efectivo sobre el Gobierno.

En el Senado habrá una última reunión a finales de enero para conocer las posibilidades de que participen en la reforma de la Cámara alta. Una reunión mantenida por los portavoces de los grupos de esa Cámara esta semana terminó sin acuerdo en lo que se refiere a la utilización de todas las lenguas del Estado en la Comisión General de Autonomías que se crea en la reforma en curso.

En dicha comisión se celebrará anualmente una sesión plenaria con único punto del día dedicado a efectuar un balance del Estado de las autonomías. El borrador de reforma señala: '"Las intervenciones que se produzcan en ella podrán realizarse en cualquiera de las lenguas que, con el castellano, tengan el carácter de cooficiales en alguna comunidad autónoma, de acuerdo con la Constitución y el correspondiente estatuto de autonomía".

En el Diario de sesiones se reproducirán las intervenciones íntegramente en castellano y en la lengua.en que se hayan realiza.do. José Miguel Ortí BordIás, ha explicado que su grupo no puede aceptar que exista en una Cámara "nacional" un sistema de traducción simultánea, aunque. está dispuesto a aceptar otras fórmulas. Ortí Bordás asegura que su grupo ha mostrado gran flexibilidad y no ha tenido inconveniente en retirar muchas de sus propuestas en aras del acuerdo.

Mientras, el presidente del Senado, Juan José Laborda, en declaraciones a Onda Cero, no ha rechazado la posibilidad de que la Cámara tenga en un futuro su sede en Barcelona, siempre que "haya acuerdo entre todos los grupos".