El asesino del policía de San Sebastián ya mató a otros dos guardias en 1991

La policía cree que el terrorista que mató en la madrugada de ayer al policía Ricardo González Colino mientras éste se disponía a jugar a las cartas en un bar de San Sebastián con dos amigos es el mismo que asesinó el año pasado, en otro bar del mismo barrio, a los guardias civiles Eduardo Sobrino y Juan Carlos Trujillo. Ambos atentados fueron realizados de forma similar: de madrugada en un bar, de un tiro en la nuca y en un radio de acción de apenas 200 metros. La policía sospecha que el terrorista vive en la zona y forma parte de un comando de información de ETA.

El asesinato se p...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La policía cree que el terrorista que mató en la madrugada de ayer al policía Ricardo González Colino mientras éste se disponía a jugar a las cartas en un bar de San Sebastián con dos amigos es el mismo que asesinó el año pasado, en otro bar del mismo barrio, a los guardias civiles Eduardo Sobrino y Juan Carlos Trujillo. Ambos atentados fueron realizados de forma similar: de madrugada en un bar, de un tiro en la nuca y en un radio de acción de apenas 200 metros. La policía sospecha que el terrorista vive en la zona y forma parte de un comando de información de ETA.

El asesinato se produjo a las 1.15 en el bar 19 de la calle de Eguía, cuando el agente Ricardo González, el propietario del establecimiento y una tercera persona se disponían a jugar una partida de cartas. Fue en ese instante cuando un hombre que vestía un chubasquero de color azul, llevaba el rostro tapado y portaba una pistola, entró en el local. Sin mediar palabra, el terrorista se situó a escasa distancia del policía y disparó el arma en una sola ocasión. La bala quedó alojada en la cabeza de Ricardo González.Las características de este atentado son muy similares al cometido el año pasado en otro bar del mismo barrio, situado a sólo 200 metros de donde ocurrió el suceso de la madrugada de ayer, y en el que perdieron la vida los dos guardias civiles mencionados. La policía piensa que se trata del mismo autor.

Ricardo González, de 38 años, soltero y natural de Cerezal de Sanabria (Zamora), era un asiduo del local. El agente, que estaba fuera de servicio, llevaba destinado en San Sebastián 11 años.

La capilla ardiente quedó instalada en el Gobierno Civil de San Sebastián, adonde acudieron los padres del fallecido, que sé desplazaron desde Zamora. Ayer tarde se celebró el funeral en la iglesia de la Sagrada Familia de San Sebastián. El cuerpo del agente será trasladado hoy a su localidad natal, Cerezal de Sanabria, donde recibirá sepultura.

La Unión Federal de Policía pidió ayer la cadena perpetua para los autores de delitos de terrorismo. Y Euskal Ezkerra (EuE), ausente de la Mesa de Ajuria Enea, exigió a ETA que silencie las armas para que el País Vasco "no se convierta en un pequeño Sarajevo". Este atentado es el cuarto que ETA comete desde que ofreciera, el 10 de julio, una supuesta tregua a cambio de negociación con el Gobierno. Mientras, la sede del PNV tiene en la calle de Tendería, en el casco viejo de Bilbao, fue apedreada en la madrugada del domingo. Éste es el tercer ataque en menos de un mes contra sedes del PNV.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En