ETA causó ayer una nueva matanza en Madrid y sembró el terror en las calles y plazas del centro de la capital. Tres capitanes, un soldado y un radiotelegrafista fueron asesinados en la explosión de un coche bomba activado por un comando de la organización terrorista vasca. El atentado se produjo en la plaza de la Cruz Verde, en el casco antiguo de Madrid y a centenares de metros de la Capitanía General y de otros edificios oficiales. Dieciséis fincas temblaron y sufrieron desperfectos. Condenas unánimes de los partidos, los sindicatos y las organizaciones cívicas se unieron ayer a la indignación de los madrileños y a la rabia de familiares y vecinos de las víctimas
El presidente del Gobierno, Felipe González, emplazó ayer a fiscales y jueces para que investiguen a los responsables de HB, a quienes calificó de "siervos vergonzantes de los terroristas". González consideró "intolerables" las amenazas de la coalición, y dijo que algunos dirigentes de este grupo político saben mucho más de lo que puede imaginarse, porque un día amenazan y al día siguiente se producen atentados.Sólo unas horas después se supo que el juez Carlos Bueren ha elevado al Tribunal Supremo las investigaciones sobre el impuesto revolucionario, ya que en las mismas aparece implicado Íñigo Iruin, senador de HB. Varios empresarios han acusado a Iruin de facilitarles contacto con representantes de ETA encargados de regatear y recoger el dinero. Anoche el fiscal del Estado, Leopoldo Torres, anunció que presentará querellas contra los dirigentes de Herri Batasuna Jon Idígoras, Floren Aoíz y Patxi Zabaleta por los delitos de desacato, amenazas y apología del terrorismo.
Unos 20 magrebíes murieron asfixiados ayer cuando intentaban llegar desde Nador (Marruecos) hasta Almería en un viejo pesquero en cuya bodega se hacinaban 250 personas.Un superviviente relató que durante la travesía habían tirado por la borda una veintena de cadáveres. Dos de los cuerpos fueron hallados en una playa del puerto de Almería a 35 kilómetros de Almería. En la misma zona, una patera desembarcó a unas 50 personas.