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La reforma de las enseñanzas universitarias costará 60,000 Millones de pesetas

La reforma de las enseñanzas universitarias renovación de contenidos en las carreras tradicionales e implantación de las nuevas titulaciones- costará casi 60.000 millones de pesetas, según Juan Rojo, secretario de Estado de Universidades e Investigación. Un porcentaje de estos recursos será distribuido concediendo una mayor subvención a las universidades de más calidad. Tal sistema de financiación se aplicará entre. 1993 y 2000 y cambiará desde este último año, en que se institucionalizará la subvención diferenciada.

Las Universidades españolas afrontarán a partir del curso 1992 / 93 un nuevo reto: ofrecer las carreras tradicionales con contenidos reformados y las nuevas titulaciones. Si los estudiantes pueden elegir ahora entre 60 carreras, a partir del próximo curso tendrán hasta 110 titulaciones, algunas de nuevo cuño, como la licenciatura en Ciencia y Tecnología de los Alimentos.El Consejo de Ministros ha aprobado hasta ahora las directrices generales de 97 titulaciones. Estas normas establecen los contenidos mínimos de cada carrera, independientemente de la Universidad que la oferte, para garantizar una formación común en todo el sistema. Cada centro académico, por tanto, tendrá autonomía para aumentar la carga lectiva. Por ello, podría darse el caso de que la carrera de Derecho, por ejemplo, mantuviera su actual duración de cinco años en algunas universidades y, en cambio, en otras, fuera de cuatro.

Este proceso tiene un coste,. centrado en las remuneraciones del personal, docente y no docente, y en los gastos de mantenimiento. El secretario de Estado de Universidades e Investigación, Juan Rojo cifró esta reforma de las enseñanzas universitarias en unos 59.800 millones de pesetas. Indicó que el Ministerio de Educación y Ciencia (MEC) financiará este proceso a través de un plan de ocho años, que quedará reflejado en los Presupuestos Generales a partir de 1993. Durante los cinco primeros años -hasta 1997-, el capítulo destinado a Universidades recogerá una partida adicional de 4.000 millones para hacer frente a esta reforma en las universidades de su territorio, que se reducirá a la mitad en los tres últimos años de aplicación del plan. En total, el coste previsto de la reforma en las universidades gestionadas por el Ministerio de Educación y Ciencia (MEC) ascenderá a 26.000 millones. Mientras que en las autonomías de Cataluña, Andalucía, País Vasco, Navarra, Canarias, Galicia y Comunidad Valenciana, con plenas competencias en educación, tendrá un costo aproximado de 33.800 millones de pesetas, según estimaciones de la Administración central.

Competencias plenas

La partida de 26.000 millones será distribuida entre las universidades gestionadas por el Ministerio de Educación y Ciencia. En función del actual sistema de financiación, esta cifra debe multiplicarse por 2,3, coeficiente utilizado para establecer el gasto equivalente en las comunidades con competencias plenas en la materia. Estas comunidades recibirán 5.200 millones en los cinco primeros años de aplicación del plan y 2.600 en los tres últimos.

En total, la Administración central destinará en los cinco, primeros ejercicios económicos 9.200 millones anuales para hacer frente a la reforma y 4.600 en cada uno de los tres últimos. Rojo indicó que estas partidas se añadirán al capítulo de Universidades en los Presupuestos, que, según ha destacado, para 1992 han experimentado "un importante crecimiento, del 9% con respecto a 1991 ".

La distribución de los, 26.000 millones entre las universidades dependientes del Ministerio tendrá en cuenta tres criterios: uno uniformista y dos variables, según explicó Rojo. La Administración, dijo, establecerá el valor de un crédito -unidad de 10 horas lectivas utilizada para medir, a partir de la reforma, los planes de estudio- que tendrá en cuenta, obviamente, el grado de experimentalidad de la carrera. Por ejemplo, no tendrá el mismo valor económico un crédito de Odontología que uno de Derecho. Para definir el valor de un crédito por cada carrera, la administración tendrá en cuenta el número de profesores del centro, el de alumnos, el tamaño de los grupos de estudiantes, el número de clases prácticas y la adaptación de la plantilla docente a la reforma.

El secretario de Estado de Universidades explicó que todas las universidades recibirán una subvención uniforme mínima, por valor de 300 créditos para cada licenciatura que oferte. Esta subvención representará entre el 85% y el 91% del total. El porcentaje restante atenderá a criterios de discriminación positiva. Entre el 6% y el 10% (entre 1.560 y 2.600 millones) de la partida total "será distribuido a las universidades para que en uso de su autonomía, actúen preferentemente en aquellas titulaciones en las que deseen poner especial énfasis", dijo Rojo. Por este concepto, la administración subvencionará como máximo 30 créditos.

Evaluación

El tercer criterio responde exclusivamente al principio de discriminación positiva. Para aplicar esta subvención, la Secretaría de Estado de Universidades reservará en un primer momento entre el 3% y 5% de la partida total, lo que supone un mínimo de 780 millones de pesetas y un máximo de 1.300. Este concepto, que acaba con la subvención uniforme basada en el principio café para todos, será distribuido de acuerdo con una evaluación institucional que se realizará a través de unos parámetros definidores de la calidad de la Universidad que establecerá la Agencia Nacional de Evaluación y Prospectiva. Entre ellos, figurarán la producción científica y la calidad de la oferta de todos los niveles de las enseñanzas de la Universidad, incluido tercer ciclo y formación continuada.

El porcentaje de discriminación positiva irá creciendo paulatinamente hasta situarse en un nivel que no ha adelantado la Secretaria de Estado de Universidades e Investigación. Las comunidades con competencias plenas en educación tendrán autonomía para implantar este sistema para financiar la reforma, o adaptar otro.

Nuevo mapa de titulaciones

La Secretaría de Estado de Universidades e Investigación ha iniciado el proceso para elaborar el nuevo mapa, de titulaciones de España. Para ello, enviará próximamente a los rectores de las universidades que gestiona un documento de bases que recogerá, entre otras cuestiones, los datos sobre la evolución del mercado de empleo en el área de influencia de cada institución académica y una proyección de las carreras que tendrán mayor demanda en el futuro.De acuerdo con estos datos, las universidades deberán elaborar una propuesta con las titulaciones que desean mantener e incorporar a su oferta. En esta propuesta deberán definir sus objetivos y el volumen de estudiantes que desearán tener el año 2.000. Estas propuestas serán negociadas posteriormente con la Secretaría de Estado de Universidades para establecer un nuevo mapa de titulaciones antes de que concluya este curso. La Secretaría de Estado de Universidades se reunirá asimismo con los consejeros de Educación de las comunidades con competencias plenas para armonizar sus respectivos mapas con los del ministerio.

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