Apoteosis

Marca / Paula, Manzanares, Ojeda

Cuatro toros de José Luis Marca, de aceptable presentación, bravos, blandos y nobles; dos de Jandilla, 4º bravucón y 5º bravo. Rafael de Paula: estocada caída (ovación y saludos); pinchazo y bajonazo (pitos). José Mari Manzanares: estocada ligeramente desprendida (oreja); estocada ligeramente caída (dos orejas), salió a hombros. Paco Ojeda: bajonazo (ovación y saludos), estocada muv caída -aviso - y rueda del toro (oreja). Plaza de Jerez, 4 de mayo. Cuarta corrida de feria. Casi lleno.

José Mari Manzanares salió en Jerez del bache en que parecia estar sumido e hizo el toreo cue le gusta a todo el mundo, al aficionado y al espectador más profano. Es verdad que le tocó un pera en dulce, un toro cortejano, pastueño al máximo. Pero el de Alicante supo aprovecharlo, haciéndole una faena de exquisito gusto. Predominó en ella la mano derecha y los muletazos tuvieron longitud y profundidad. El cambio de mano, el trincherazo o los de pecho con que rernató las series fueron una auténtica obra de arte. Con la mano izquierda se prodigó menos pero los naturales fueron con la mano muy baja, obligando mucho al toro y tuvieron el marchamo de la obra bien hecha. Se gustó en la última serie con la derecha, toreando con desmayo y mucho sentimiento.En su primero hubo también muletazos de buen corte, aunque en algunos le faltó ajuste. Los naturales tuvieron más corta trayectoria, pues el recorrido del toro era menor aunque también fue nobilísimo.

Paco Ojeda se emborrachó de torear al sexto y no tuvo en cuenta el reloj, por lo que a poco de entrar a matar, le sonó un aviso, pese a lo cual y haber quedado la estocada muy caída, el presidente, ante la petición casi unánime, le concedió la oreja. La verdad es que la faena lo mereció. Exprimió al toro como un limón. Lo citaba a distancia, nada de encimismo, le adelantaba la muleta, le caroaba la suerte, lo templaba y lo remataba con desahogo para darle el siguiente muletazo. Hubo toreo del bueno por ambos lados, y los de pecho fueron auténticamente obligados. En su primero también toreó con buen corte, algún enganchón aparte, pero el toro era tardo y al faltar continuidad en las series le restó brillantez a su labor.

El toreo con el capote tuvo como protagonista a Rafael de Paula. Tanto los lances de saludo a su primero como las verónicas en el sexto toro de Ojeda fueron de una plasticidad espléndida. Con la muleta toreó a su primero sin afligirse pero con escaso ajuste y al cuarto, bravucón, lo trasteó por bajo, sin intentar probarlo.

Doce orejas y cuatro rabos

Doce orejas y cuatro rabos, además de una petición de indulto para un novillo, hubo en el festejo celebrado ayer en Sanlúcar la Mayor (Sevilla), con reses de Soto de la Fuente, bien presentadas y bravísimas.

José Antonio Muñoz cortó cuatro orejas y dos rabos, y el resto de los apéndices los obtuvieron Julio Martínez y Ángel de la Rosa. El público pidió el indulto para el sexto novillo.