La clase alta ha aumentado un 40% en los últimos 15 años
El número de directores y gerentes de empresa ha crecido en Madrid, en los últimos 15 años, un 40%, y la clase media alta se ha incrementado un 24%. Las conclusiones de una investigación sobre formas de vida en Madrid, que desde 1987 realiza el departamento de estudios y análisis de¡ Ayuntamiento de Madrid, revelan que en tres lustros se han acentuado las diferencias entre las clases altas y bajas. A estas últimas afecta cada vez más la tendencia a la pérdida de estabilidad del empleo porque los asalariados fijos, que en 1975 eran la mitad de la población trabajadora, han pasado a significar un 37% en la actualidad.
Los sociólogos lo llaman "modelo reloj de arena". Así intentan describir el aumento que han registrado en los últimos años los grupos sociales en posiciones inferiores y superiores. La clase alta, formada para el análisis por directores y gerentes de empresa, y la clase media alta, integrada por profesionales y técnicos, representan un 18% de la población. En 1975 eran el 13%.Una de las causas de este distanciamiento, según el informe dirigido por el sociólogo Carlos Lles y por responsables del departamento municipal de estudios y análisis, es la marcada evolución del mercado laboral madrileño hacia la disminución de los asalariados fijos. La pérdida de empleos estables se debe al descenso de los obreros de la industria y la construcción, que han pasado del 16,5% al 5,4% En los últimos 10 años han desaparecido 132.560 puestos de trabajo de obreros industriales.
Sector servicios
La importancia que adquiere el sector de servicios frente a la decadencia que experimenta el industrial explica, a juicio de los investigadores, los cambios en la estructura social madrileña. Tres de cada cuatro trabajadores están empleados en el sector servicios. De estos tres, uno tiene muchas probabilidades de trabajar en la Administración.
De cada tres asalariados, dos tienen un contrato indefinido, uno de cada cinco un contrato temporal y uno de cada diez no tiene contrato. Por zonas, la mayor proporción de relaciones indefinidas se da en las áreas del centro y del noroeste y es en la zona sureste donde aumenta la proporción de trabajadores temporales (uno de cada cuatro).
El análisis revela que sólo un 25% de la población femenina de más de 13 años trabaja, la mayor parte a tiempo parcial. Un 15% de las mujeres no tiene contrato, frente al 5% de los varones que sufre la misma situación.
Entre los profesionales y los técnicos la población ocupada de varones (un 14,8%) es similar a la de mujeres (un 14,5%). Sin embargo, las diferencias son más acusadas en la escala de directores. Los varones son un 4,7% y las mujeres el 1,3%.
