Moudhi Bint Ali Aziz,

hija del fallecido rey Jhalid de Arabia Saudí, se ha encontrado con una desagradable sorpresa tras regresar a Londres después de unas largas vacaciones fuera del Reino Unido: la casa londinense de su propiedad había sido vendida a unos nuevos inquilinos por más de cuatro millones de dólares (casi 490 millones de pesetas). Según informa Efe, James Lacelle, el hombre que realizó la venta de la mansión, situada en una lujosa zona residencial, aprovechó la ausencia de la princesa para conseguir una orden judicial autorizándole a vender el edificio como compensación a unos...

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hija del fallecido rey Jhalid de Arabia Saudí, se ha encontrado con una desagradable sorpresa tras regresar a Londres después de unas largas vacaciones fuera del Reino Unido: la casa londinense de su propiedad había sido vendida a unos nuevos inquilinos por más de cuatro millones de dólares (casi 490 millones de pesetas). Según informa Efe, James Lacelle, el hombre que realizó la venta de la mansión, situada en una lujosa zona residencial, aprovechó la ausencia de la princesa para conseguir una orden judicial autorizándole a vender el edificio como compensación a unos trabajos de decoración impagados, aunque una inspección realizada por la policía señala que no hay muestras de renovaciones en la residencia "desde hace bastante tiempo".

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