Hullasa recibirá del Estado el nivel máximo de ayudas oficiales

La empresa asturiana Hullasa recibirá del Estado el nivel máximo de ayudas oficiales previstos para las compañías mineras de acuerdo con el convenio suscrito esta semana por la sociedad con el Ministerio de Industria y Energía.Según dicho convenio, Hullasa recibirá una subvención a fondo perdido cercana a los 200 millones de pesetas, equivalente al 20% de la inversión, que tiene previsto realizar en la explotación del empresario leonés Victorino Alonso, quien recientemente accedió a la propiedad de la sociedad. Al mismo tiempo, el ministerio está dispuesto a conceder una subvención reintegrabl...

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La empresa asturiana Hullasa recibirá del Estado el nivel máximo de ayudas oficiales previstos para las compañías mineras de acuerdo con el convenio suscrito esta semana por la sociedad con el Ministerio de Industria y Energía.Según dicho convenio, Hullasa recibirá una subvención a fondo perdido cercana a los 200 millones de pesetas, equivalente al 20% de la inversión, que tiene previsto realizar en la explotación del empresario leonés Victorino Alonso, quien recientemente accedió a la propiedad de la sociedad. Al mismo tiempo, el ministerio está dispuesto a conceder una subvención reintegrable, equiparable al 35% de la inversión, y el grupo leonés propietario de la sociedad se compromete a suscribir una ampliación de capital mínima de 200 millones de pesetas, cuyo desembolso se realizará en los próximos cuatro años, a razón de un 25% cada año.

La dirección de Hullasa deberá también presentar una auditoría, conforme a lo establecido en el Nuevo Sistema de Contratación del carbón térmico. El desarrollo del convenio estará supervisado por la Dirección Regional de Minas del Principado de Asturias.

La empresa Hullasa, con un solo pozo en explotación, situado en el municipio de Teverga, fue adquirida por el empresario Victorino Alonso, quien se ha comprometido al reflotamiento de la sociedad. Hullasa se encontraba abocada al cierre en el momento en que se produjo la compra, tras varios meses de conflictividad, con unas instalaciones y equipamiento técnico muy obsoletos y en una situación jurídica atípica, tras varios años de intervención estatal.

Esta misma semana, la dirección y el comité de la empresa suscribieron el convenio colectivo para 1988, en el que se estipula un incremento salarial del 5%, a la vez que se han iniciado las negociaciones de un nuevo convenio de vigencia cuatrienal, que se extenderá hasta 1992 y en el que se preven, entre otras mejoras, un aumento del precio de los destajos en un 150% y el incremento de las pagas extraordinarias, que pasan de 21.000 a 32.000 pesetas.

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