El líder radical, 'informador real' para resolver la crisis danesa

Niels Helveg-Petersen, líder del pequeño pero extremadamente importante Partido Radical Liberal, fue designado ayer por Margarita de Dinamarca informador real para buscar una fórmula que permita llegar a un nuevo Gobierno tras las elecciones legislativas del pasado día 10, en las que ningún partido ni coalición logró la mayoría absoluta en el Parlamento.La primera tarea de Helveg-Petersen será conseguir respaldo para una política que pueda ser apoyada por una mayoría amplia de las formaciones políticas danesas, como paso previo a un acuerdo que permita la formación de un nuevo Gabinete....

Niels Helveg-Petersen, líder del pequeño pero extremadamente importante Partido Radical Liberal, fue designado ayer por Margarita de Dinamarca informador real para buscar una fórmula que permita llegar a un nuevo Gobierno tras las elecciones legislativas del pasado día 10, en las que ningún partido ni coalición logró la mayoría absoluta en el Parlamento.La primera tarea de Helveg-Petersen será conseguir respaldo para una política que pueda ser apoyada por una mayoría amplia de las formaciones políticas danesas, como paso previo a un acuerdo que permita la formación de un nuevo Gabinete. Pero sus posibilidades son pequeñas. La crisis está aún lejos de su solución. Aún podría prolongarse una o dos semanas más.

El lunes por la noche, el primer informador real, el presidente del Folketing (Parlamento), Svend Jakobsen, renunció, tras reconocer su impotencia para reconciliar las posiciones de los partidos. La reina tenía que nombrar su sustituto. Los cuatro partidos de centro y derecha, la coalición de Gobierno que preside el conservador Poul Schlüter y el ultraderechista Partido del Progreso propusieron al primer ministro en funciones. Helveg Petersen se propuso a sí mismo y los dos partidos de izquierda (el socialdemócrata y el socialista popular) apoyaron al líder radical para evitar la designación de Schlüter. Las cuentas daban a la opción de Helveg-Petersen el apoyo de 90 diputados, frente a 89 de la contraria. Y la reina actuó en consecuencia.

Compleja situación

Por dos ocasiones consecutivas los socialdemócratas (que con 55 escaños siguen siendo la principal formación política danesa) no presentaron a su propio líder, Svend Auken, como cabeza de la negociación. La situación es compleja. Schlüter no quiere hablar con Auken, y Helveg-Petersen desconfía de él. Los dos consideran que el líder socialdemócrata ha defraudado en demasiadas ocasiones su confianza durante las últimas dramáticas semanas.

Es muy difícil que Helveg-Petersen, cuyo partido ganó tan sólo 10 de los 179 escaños en disputa el pasado día 10, se convierta en el próximo primer ministro danés, aunque encabece ahora las negociaciones. Su plan es negociar con las otras ocho formaciones representadas en el Folketing, pero no se espera que forme Gobierno, aunque cualquier cosa puede ocurrir estos días en la política danesa.

Según están las cosas, ni Schlüter ni Auken parecen dispuestos a entrar en un Gabinete que presida Helveg-Petersen. En cuestión de días, el líder radical puede verse forzado a optar por uno u otro bando. La solución de centro-derecha parece la más probable.

Entre tanto nadie dedica un pensamiento a la OTAN, aunque la forma de pertenencia a la Alianza estuvo en el origen de la disolución del Parlamento y fue el principal tema de debate durante la campaña.