MEXICO 86

La RFA, más certera que México en los lanzamientos finales

México y la RFA, en un feo, triste y violento encuentro, alcanzaron la prorroga sin haber encontrado puerta. En el. lanzamiento de penaltis se impuso la RFA.De salida, dos equipos con planteamientos muy conservadores que parecían dejar el desenlace del partido a una jugada de suerte que permitiera adelantarse en el marcador. Beckenbauer, seleccionador de la RFA, planteó el partido con más miedo que vergüenza: cinco defensas y, a veces, seis, que esperaban alguna ocasión de contraataque. México salió con el planteamiento ya clásico en anteriores partidos, a base de cinco centrocampistas ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

México y la RFA, en un feo, triste y violento encuentro, alcanzaron la prorroga sin haber encontrado puerta. En el. lanzamiento de penaltis se impuso la RFA.De salida, dos equipos con planteamientos muy conservadores que parecían dejar el desenlace del partido a una jugada de suerte que permitiera adelantarse en el marcador. Beckenbauer, seleccionador de la RFA, planteó el partido con más miedo que vergüenza: cinco defensas y, a veces, seis, que esperaban alguna ocasión de contraataque. México salió con el planteamiento ya clásico en anteriores partidos, a base de cinco centrocampistas y sólo Hugo Sánchez en punta. El resultado de estas tácticas y del miedo recíproco fue la formación de un mogollón en el centro del campo y que en toda la primera parte sólo se produjese una ocasión clara de gol, para la RFA, dos minutos antes del descanso.

Más información

Fue un partido bronco, movido y muy disputado, con continuas querellas particulares entre los Jugadores de uno y otro equipo. Los hombres claves de cada conjunto fueron severamente marcados. A Hugo Sánchez le seguía continuamente Eder. A los dos hombres punta de la RFA, Allofs y Rummenigge, les marcaban Servín y Quirarte.

Parecía el típico partido que se resuelve con un gol del primero que tenga la suerte de lograrlo. México era incapaz de abrir hueco en la maralla defensiva de la RFA. A los cinco minutos de la segunda parte el público ya gritaba Abuelo, Abuelo, reclamando la salida del veinteañero Cruz. Fue un partido en el que fracasaron las figuras. Hugo Sánchez jugó más de santilbanqui que de delantero centro y fue incapaz de liberarse del marcaje de Foerster. Rummenigge estuvo completamente inoperante.

Cuanto faltaban 23 minutos, para terminar el tiempo reglamentario, una decisión del árbitro colombiano pudo dar un giro al partido al expulsar a Berthold y no hacer lo mismo con Quirarte. A partir de ese momento, con un jugador más y animado constantemente por su público, México se lanzó a una ofensiva total contra la portería de la RFA. Los mexicanos achucharon y crearon situaciones de peligro, que no concretaron. En la prórroga el partido se igualó numéricamente con la expulsión de Aguirre.

Archivado En