La sentencia da razon al fiscal
Los resultados de la sentencia dan la razón a la película de los hechos que narró el ministerio fiscal durante los dos días que duró la vista pública. En uno de estos resultandos se dice del asesino que es "huérfano de padre, con un coeficiente intelectual normal pero con resultados escolares muy mediocres; de carácter introvertido, egocéntrico, frío, calculador, metódico y con buenas disposiciones para trabajos manuales". Más adelante se afirma que Ángel Mayayo "no padece enfermedad física ni mental de clase alguna, pero sí un trastorno paranoide de la personalidad, con algunos rasgos de psicopatía esquizoide y de psicopatía depresiva e incluso con algunos rasgos neuróticos, pero de una gravedad superior a la simple neurosis, trastorno que disminuía parcialmente, en forma especial y en determinadas circunstancias, su capacidad volitiva e intelectiva sin llegar a anularlas".En el día de ayer no se encontraban en sus respectivos domicilios ni el abogado defensor de Mayayo, José Luis Calderón, que estaba de viaje; ni el fiscal de la Audiencia Provincial, Antonio Carbajo, que se había desplazado a Barcelona. Estaban también ilocalizables el abogado de la familia Salomó y el propio industrial, pero un familiar de los aceiteros, que prefirió no dar a conocer publicamente su identidad, manifestó a EL PAÍS estar sorprendido por la sentencia y "considerarla injusta", aunque no quiso especificar más detalles. Señaló que "en un plazo de cinco días la familia decidirá si se apela el fallo o no".
