El Plan Económico de Aragón prevé inversiones por valor de 168.000 millones en cuatro años

Las Cortes de Aragón han aprobado un plan económico a desarrollar en la región durante los próximos cuatro años, y en el que se establecen una serie de objetivos y prioridades en lo económico, equipamiento social y ordenación territorial. El Plan Económico de Aragón cuenta con una financiación de 126.000 millones de pesetas de inversión pública y 39.259 millones de pesetas de los recursos disponibles de la comunidad autónoma.El Gobierno aragonés pretende corregir los graves desequilibrios internos de la región, tal como se ha puesto de manifiesto en un estudio sobre ...

Las Cortes de Aragón han aprobado un plan económico a desarrollar en la región durante los próximos cuatro años, y en el que se establecen una serie de objetivos y prioridades en lo económico, equipamiento social y ordenación territorial. El Plan Económico de Aragón cuenta con una financiación de 126.000 millones de pesetas de inversión pública y 39.259 millones de pesetas de los recursos disponibles de la comunidad autónoma.El Gobierno aragonés pretende corregir los graves desequilibrios internos de la región, tal como se ha puesto de manifiesto en un estudio sobre La renta Municipal de Aragón, elaborado por un equipo de especialistas a cargo de la Caja de Ahorros de Zaragoza, Aragón y Rioja, y que acaba de publicarse en un grueso volumen.

El citado informe, el segundo de estas características que se realiza en España después del de Asturias, revela que sólo ocho comarcas aragonesas alcanzaron una renta por encima de la media en 1981 y que fue de 374.337 pesetas anuales. Por contra, 15 comarcas están por debajo de la media regional. Se refleja, asimismo, que las bolsas de pobreza aparecen en las comarcas en las que la cabecera tienen poca población.

De proseguir esta línea de evolución, dentro de 10 años, la ciudad de Zaragoza concentrará por sí sola las tres cuartas partes de los habitantes de Aragón y, por el contrario, la tercera parte de su territorio se quedará con densidades inferiores a los cinco habitantes por metro cuadrado, es decir, similares a zonas desérticas.