Tribuna:

Cambio de programa por causas ajenas a la empresa

Aunque no se puede hablar de cambio de tendencia, ya que ésta continúa siendo alcista, ayer el mercado sufrió cierta ruptura por razonas ajenas a la empresa, como anunciaban antiguamente los cines de barrio al modificar la programación anunciada.Lo cierto es que la bolsa abrió ayer con la misma alegría que en la sesión anterior, lo que se refleja en el comportamiento de los valores eléctricos, a pesar de los variados rumores que nacen todos los días y que sirven más para introducir elementos de confusión entre los ahorradores que para ir despejando efectivamente las incógnitas mil veces coment...

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Aunque no se puede hablar de cambio de tendencia, ya que ésta continúa siendo alcista, ayer el mercado sufrió cierta ruptura por razonas ajenas a la empresa, como anunciaban antiguamente los cines de barrio al modificar la programación anunciada.Lo cierto es que la bolsa abrió ayer con la misma alegría que en la sesión anterior, lo que se refleja en el comportamiento de los valores eléctricos, a pesar de los variados rumores que nacen todos los días y que sirven más para introducir elementos de confusión entre los ahorradores que para ir despejando efectivamente las incógnitas mil veces comentadas. No obstante, parece que las informaciones aparecidas sobre el posible acuerdo entre Iberduero y Unión-Fenosa tienen bastantes posibilidades de ir hacia adelante. También los valores bancarios llegaron a la plaza de la Lealtad con dinero.

Pero esa actitud se vio truncada por las noticias, que se esparcieron rápidamente sobre el parqué, respecto al atentado sufrido por el general Rosón, y que además, en los primeros momentos, se vieron enturbiadas con rumores, desmentidos posteriormente, sobre otro atentado que nunca llegó a tener lugar.

Desde ese momento, el ambiente comenzó a deteriorarse y el papel hizo su aparición, especialmente en el corro bancario, que terminó con un saldo vendedor de 64.322 títulos en la caja de las siete mayores entidades, mientras que las órdenes compradoras sólo totalizaron 5.638 acciones.

Curiosamente, el nerviosismo con que transcurrió la última parte de la contratación no afectó apenas a Telefónica, que consiguió ganar 0,75 enteros, a pesar de que este cambio se fijó después de conocer todas las novedades del día.

En estas condiciones, no es raro que la jornada no diera mucho más de sí, con aparición de papel al cierre que no fue suficientemente recogido en las estadísticas y que puede originar un retroceso en la sesión de hoy.

Sin embargo, se trata de un bache muy coyuntural que no debe influir en esa tendencia alcista defendida por los expertos. Los volúmenes de contratación de estos días -1.708,8 millones de pesetas efectivos el lunes y 1.532,2 millones el martes- demuestran cierta fortaleza del mercado. Mientras que las compras a crédito se han abierto a una serie de valores -no necesariamente pertenecientes al sector eléctrico- que afianzan la idea de selectividad que ahora -vive la bolsa. Así, es difícil apostar por un descenso fuerte o continuado.

Por otra parte, Bendibérica repartió ayer un dividendo de 32,80 pesetas netas, y el valor repitió su cambio anterior, por lo que recuperó íntegramente la derrama. Inbazasa, por su lado, distribuyó 30 pesetas netas, y el valor mantuvo su cambio, aunque en posición dinero.

A nivel de ampliaciones, se confirmó oficialmente la de Petromed, en la proporcion de una por 10, gratis, a partir del próximo 10 de diciembre. También anunció oficialmente su ampliación Guiral Industrias Eléctricas (Giesa), en 401,3 millones de pesetas, mediante la emisión de acciones de 500 pesetas nominales, liberadas al 50%, y en la proporción de dos acciones nuevas por cada cinco antiguas, a partir del primero de diciembre.

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