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Expectación ante el lanzamiento del cohete Ariane después de los fallos del 'Challenger'

El octavo lanzamiento de un cohete europeo Ariane, que deberá poner en órbita un nuevo satélite de comunicaciones, ha despertado gran expectación en medios de la industria aeroespacial, tras los fracasos del. transbordador norteamericano Challenger, puesto que ambas naves compiten en el mercado de ese sector. El éxito del Ariane puede decantar del lado europeo la competencia, en la que entran en juego importantes intereses comerciales. El Challenger no consiguió poner correctamente en órbita los dos satélites que debía lanzar, a finales de enero.El lanzamiento del Ariane está previsto para el lunes. El satélite que debe situar en órbita es del tipo Intelsat V, el mayor satélite civil de comunicaciones construido hasta la fecha, propiedad de la organización internacional Intelsat. El satélite, de 1.870 kilogramos de peso, se instalará en la órbita geoestacionaria, a 36.000 kilómetros sobre el Ecuador, y tendrá una vida de siete años, con una capacidad de 12.000 líneas telefónicas y dos canales de color de televisión.

Para el Ariane se trata del último lanzamiento de promoción, antes de pasar a ser explotado por la empresa comercial Arianespace. El diseño, desarrollo y construcción del cohete ha corrido a cargo de la Agencia Espacial Europea (ESA), que reúne a 11 países, entre ellos España.

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