40.000 millones en instalaciones olímpicas
El Ayuntamiento de Barcelona lleva más de un año trabajando en la preparación de su alternativa olímpica. Romá Cuyás fue nombrado delegado del alcalde para la preparación de la candidatura y hace escasos meses presentó un amplío estudio a Narcís Serra. Ese estudio significaba la primera aproximación, que contemplaba, además, las primeras conclusiones: 1. El proyecto es bueno para Barcelona, Cataluña y España; 2. No se trata de un proyecto utópico, pues puede planearse a nueve años vista. El proyecto se contempla, desde un principio, bajo el prisma del Comité Olímpico Inter nacional (COI), que desea que los Juegos se realicen "a escala de ciudad y no a escala de Estado".El punto más amplio del estudio se centraba en los sistemas de financiación de la Olimpiada. Cuyás, que fue felicitado por Narcís Serra por su primer trabajo, segmentó este tema en tres partes. Por un lado, están los gastos de organización, que pueden cubrirse a la perfección, como ha quedado demostrado en las tres últimas Olimpíadas (Moscú-80, Montreal-76 y Munich-74), con los ingresos propios del certamen, como son las taquillas, emisión de sellos y moneda y demás alternativas. En este punto, Cuyás considera que los norteamericanos llevarán este apartado hasta cotas inimaginables en los Juegos de Los Angeles-84. El segundo punto comprende la realización de las instalaciones deportivas. En este sentido, el estudio establece que se necesitarán veinticinco instalaciones de competición (hay que tener en cuenta que, por entonces, el tenis y, tenis de mesa ya serán deportes competitivos) y unos 49 campos de entrenamiento de todo tipo. Cuyás considera que "Cataluña está bien dotada en este último aspecto y tendrá que realizar una inversión próxima a los 40.000 millones de pesetas para los recintos competitivos, aunque esa cifra es variable, según la alternativa que se elija". Cuyás se refiere a que "es muchísimo más caro construir un nuevo estadio que remodelar Montjuïc y más barato organizar las competiciones de remo y piragüismo en el lago de Banyoles que construir un carísimo campo de regatas". El tercer punto es el que hace referencia a la infraestructura social, urbana y vial de Barcelona y sus alrededores, que está ampliamente contemplado en los proyectos urbanísticos ya existentes sobre el Area Metropolitana, que está totalmente estructurada.
