Los temblores de tierra no revisten peligro, según técnicos del Instituto Geográfico

Navarra se encuentra en una zona sismográfica de intensidad media y todo hace suponer que los últimos movimientos sísmicos registrados en la provincia, no revisten gravedad alguna, según manifestaron ayer tarde en Pamplona técnicos del Instituto Geográfico Nacional durante el transcurso de una conferencia de Prensa. Estos técnicos, que se habían desplazado a Navarra a petición del gobernador civil, Francisco Javier Ansuátegui, estudiaron la situación creada a raíz de estos temblores de tierra que habían alarmado a la población.

Según señaló Julio Mézcua, jefe de la sección de Sismol...

Navarra se encuentra en una zona sismográfica de intensidad media y todo hace suponer que los últimos movimientos sísmicos registrados en la provincia, no revisten gravedad alguna, según manifestaron ayer tarde en Pamplona técnicos del Instituto Geográfico Nacional durante el transcurso de una conferencia de Prensa. Estos técnicos, que se habían desplazado a Navarra a petición del gobernador civil, Francisco Javier Ansuátegui, estudiaron la situación creada a raíz de estos temblores de tierra que habían alarmado a la población.

Según señaló Julio Mézcua, jefe de la sección de Sismología del Instituto Geográfico Nacional, en estos días que han estado en Navarra se ha hecho un estudio completo de la zona afectada por los movimientos así como de los efectos causados por los mismos. Julio Mézcua dijo también que estos movimientos de tierra habían tenido una intensidad pequeña y que, consiguientemente, los efectos causados no habían sido importantes.

"Se ha hecho además", añadió, "un estudio del riesgo sísmico de Pamplona y sus alrededores, y como ya estaba previsto, coloca a Pamplona en una zona de intensidad media. No es previsible que en el futuro vaya a existir algún problema".

El jefe de la sección de sismología del Instituto Geográfico Nacional informó de que, según los datos de que disponían, desde 1396 hasta 1979, la intensidad máxima de los movimientos registrados en Navarra había sido de siete. Añadió posteriormente que existe la posibilidad de que, en un plazo de unos quinientos años haya un movimiento que alcance esta intensidad.