GENTE

Javier Tusell,

director general de Bellas Artes, vió superada ayer la autoridad del cargo que hasta el momento ostenta, frente a las medidas de seguridad de la Casa Real a propósito de la reapertura del Jardín Botanico de Madrid. Llegó ayer Tusell minutos antes de la hora fijada para la inauguración del recinto con la pretensión de entrar en el mismo por los accesos que dan a la Cuesta de Claudio Moyano. Esta puerta, habitualmente abierta, permanecía cerrada ayer a cal y canto, por medidas de seguridad, ante la presencia de los Reyes. "Abran, porque soy el director general de Bellas Artes", señaló ante la ne...

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director general de Bellas Artes, vió superada ayer la autoridad del cargo que hasta el momento ostenta, frente a las medidas de seguridad de la Casa Real a propósito de la reapertura del Jardín Botanico de Madrid. Llegó ayer Tusell minutos antes de la hora fijada para la inauguración del recinto con la pretensión de entrar en el mismo por los accesos que dan a la Cuesta de Claudio Moyano. Esta puerta, habitualmente abierta, permanecía cerrada ayer a cal y canto, por medidas de seguridad, ante la presencia de los Reyes. "Abran, porque soy el director general de Bellas Artes", señaló ante la negativa del guarda a franquearle el paso. Este, impasible, contestó que nadie podía entrar por allí porque tenía órdenes muy concretas. "Soy el que manda en el Jardín", insistió, enrojecido, Tusell, quien, ante la firmeza del guarda, tuvo que optar por volver a subirse en su coche oficial y entrar, como todo el mundo, por la entrada principal.

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