_
_
_
_
_

Punset critica en Bruselas las aspiraciones proteccionistas de buena parte del empresariado español

Soledad Gallego-Díaz

El ministro español para las Relaciones con la Comunidad Económica Europea, Eduardo Punset, lanzó ayer en Bruselas un duro ataque contra los sectores de la economía privada de nuestro país, que siguen exigiendo una política proteccionista. Punset, que asistió a un almuerzo ofrecido por la Cámara de Comercio de España en Bélgica y la Asociación Hispano-Belga, dijo que la frase «Mercado Común, sí; pero no a cualquier precio», encierra una petición encubierta de proteccionismo y un mal razonamiento económico

El ministro español, que visita oficialmente Bélgica y que ha mantenido entrevistas con el primer ministro, Wilfried Martens, y con el ministro de Asuntos Exteriores, Ferdinand Nothomb, afirmó que el proteccionsimo y el intervencionismo existen («a menudo con nombre propio») como consecuencia de las presiones que emanan del sector privado de la economía. «La historia de estos últimos años», añadió, «en lo que concierne a la promoción, esencialmente verbal, de ciertas medidas económicas de carácter liberal, especialmente la llamada "economía social de mercado", es un buen ejemplo de la forma ineficaz de hacer las cosas».Punset explicó que estas manifestaciones a favor del mercado, de una parte, se mezclan por otra, de forma más o menos velada, con exigencias de intervencionismo.

Para Eduardo Punset, la situación debería ser exactamente la contraria. La actual crisis de la economía española, la más larga y profunda que conocemos, debería ser el cuadro más indicado en favor de un cambio y la prueba más convincente de que la economía española no puede funcionar de forma adecuada si sigue conservando sus principales líneas de funcionamiento».

Punset reconoció que la adhesión de España a la CEE, en la coyuntura actual, tendrá efectos adversos sobre ciertos sectores, pero también efectos positivos sobre otros.

«Lo más importante», añadió, «es que el grado de competitividad del sistema español de producción va a aumentar en su conjunto y que se va a compenetrar con un mercado de trescientos millones de personas».

A continuación puso de manifiesto que para las personas ineficaces no habrá nunca períodos transitorios suficientemente largos para adaptar la economía española a la comunitaria.

«El cambio», prosiguió el ministro, «no puede efectuarse sin coste ni sin el abandono y desmantelamiento de una parte de lo que existe actualmente; pero, al mismo tiempo, la extensión del mercado permitirá una reinversión de los recursos no empleados y de los utilizados en esas estructuras, que habrá que abandonar».

«El obstáculo más importante entre el sistema de producción español y la Comunidad Europea reside en el conjunto de las inercias que nacieron bajo la protección de unas reglas económicas con tendencia al proteccionismo y al intervencionismo administrativos», dijo Punset.

En su opinión, se trata de un obstáculo superior al de la Comisión Europea, los agricultores franceses, la política agrícola común o la propia Administración pública española.

Eduardo Punset señaló que los empresarios debían ser las personas más interesadas en el proceso de adhesión, más aún porque tienen en su mano el proceso de redistribución de riqueza que comporta el ingreso en la CEE.

Enfrentamiento con el representante de la CEOE

El representante de la CECIE en Bruselas, Guillermo Rueda, discrepó de la exposición del ministro y se quejó del «proteccionismo comunitario». Punset respondió señalando que el precio que tenía que pagar España para entrar en la CEE «está muy claro». «Es necesario que los españoles comprendan que la negociación para la adhesión no es una negociación "colectiva", sino la búsqueda de la mejor forma de aproximación a la reglamentación de la CEE».El ministro para las Relaciones con la CEE acusó a ciertos sectores privados de transmitir a la opinión pública española una impresión «negativa», que responde a los intereses de los que siguen siendo partidarios del intervencionismo.

Ferdinand Spaak, director general comunitario encargado de la ampliación de la CEE, que asistió a la comida, calificó la intervención de Punset de «valiente» e «importante».

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_