Medidas de apoyo a la patata valenciana

Los principales mayoristas de patatas dirigirán sus compras hacia la zona valenciana, según acuerdo adoptado ayer con los agricultores, con lo que queda resuelto el problema planteado en el sector por la caída vertical de sus precios en las últimas 48 horas.El ministro de Agricultura recibió ayer en su domicilio, antes de la reunión con el Gabinete, a una comisión de agricultores, que le expusieron este problema; tras varias gestiones con la Administración y la Asociación Nacional de Mayoristas de Patatas, para el mercado interior se llegó al acuerdo mencionado.

Esta caída «fulminante» en los precios de la patata (ha llegado hasta catorce pesetas/kilo) resulta incomprensible para la Administración y hay que atribuirla a problemas de exportación a algunos mercados europeos a los que generalmente se dirigen, especialmente el inglés.

Tras el acuerdo alcanzado ayer, los mayoristas adquirirán la patata temprana a un precio mínimo de dieciocho pesetas/kilo, similar al que se está pagando en las zonas de producción murciana y almeriense, que estos días finalizan sus campañas. Según el director general de Comercio Interior, Félix Pareja, se podrá absorber toda la patata valenciana durante las próximas semanas; aun siendo grandes las dificultades para exportarlas, hay escasez en el mercado interior y el tiempo frío que aún viven algunas zonas del país origina en ellas una mayor demanda, al tiempo que retrasa las cosechas.

Representantes de los sindicatos valencianos que negociaron ayer en Madrid han expresado su satisfacción por los acuerdos alcanzados, porque con ellos se conseguirán, al menos de momento, unos precios ligeramente superiores a los costes de producción.

Este año, a pesar de los problemas registrados en 1978, se han reflejado alzas espectaculares en los precios de la patata; en esta ocasión la superficie sembrada puede llegar a las 200.000 hectáreas (casi el 10% más que en 1978), a la vista de las siembras realizadas hasta el momento. Esta promoción en los cultivos de patata puede deberse a las inclemencias climatológicas, que no han permitido cumplir las previsiones de cebada; a la contingentación de la remolacha, que ha originado en algunas zonas una desviación hacia la patata, y, finalmente, al considerable precio alcanzado por este producto.