Stekelenburg no envejece en Países Bajos

Frank de Boer es un personaje difícil de catalogar, como si tuviera vida propia y no quisiera formar parte de ninguno de los bandos que conviven en el fútbol de Países Bajos, por más que su vida haya girado alrededor del Ajax. No se sabe muy bien si es despistado, se confunde —sobre todo con los nombres de los jugadores—, o tiene lapsus de comunicación como se ha apreciado en la Eurocopa. Nadie duda, en cualquier caso, de que es un técnico imprevisible desde que aceptó el cargo que dejó vacante Ronald Koeman y no aceptaron técnicos como Rijkaard. “Igual sorprende al rival que a su equipo”, coinciden los periodistas que conocen al técnico, que jugó en el Barça.

Alcanza con observar el ruido que han provocado sus decisiones sobre los porteros Jasper Cillessen, Tim Krul y Maarten Stekelenburg. Irritó de salida al meta del Valencia por descartarle de la lista al dar positivo por coronavirus cuando le había prometido que sería citado: “Aunque fue muy amargo, no quiero correr riesgos sino que necesito certezas y no tengo la seguridad de que vaya a estar bien para la Eurocopa” se excusó De Boer. Cillessen, de 32 años, respondió: “No vi venir el golpe y estoy dolido; algo cambió. Había tiempo para esperar; me siento en plena forma”. La segunda decisión del entrenador fue apostar por Stekelenburg cuando el titular parecía ser Krul.

“El debate ha sido muy intenso porque la decisión era difícil”, replicó De Boer. “Respeto mucho a Tim, pero jugará Maarten. Es una cuestión de intuición”. Jugó Stekelenburg ante Ucrania y se supone que también lo hará ante Austria este jueves en el Johan Cruyff Arena (21.00 horas Telecinco). “Si me llegan a decir al principio de temporada que iba a disputar la Eurocopa me habría dado un ataque de risa”, confiesa Stekelenburg (Haarlem, 1982), que a sus 38 años y 264 días se convirtió en el jugador más veterano del torneo —el meta húngaro Gábor Király mantiene el récord con 40 años— y también en el de más edad que viste la zamarra oranje tras superar a Edwin van der Sar (37).

Stekelenburg no ha disputado más de 25 partidos en distintos clubes desde 2017. Ha regresado y renovado hasta 2022 por el Ajax después de su paso por el Roma, Fulham, Mónaco, Southampton y el Everton. No tuvo muchas oportunidades en el club inglés y acabó por aceptar la propuesta del Ajax de Ten Hag. El entrenador holandés quería un portero que presionara a André Onana. Ocurrió que el camerunés fue suspendido nueve meses por dopaje —se le encontró furosemida— y en enero se abrió la portería para Stekelenburg. Tampoco jugaba en la selección desde noviembre ante Luxemburgo hasta que convenció a De Boer en el amistoso contra Georgia y desbancó a Krul.

Los penaltis de Van Gaal

El guardameta del Norwich se hizo famoso en el Mundial de Brasil-2014 cuando Louis Van Gaal le dio salida a la cancha cuando faltaba un minuto para acabar la prórroga en sustitución de Cillessen para que afrontara la tanda de penaltis en los cuartos de final contra Costa Rica. Krul detuvo dos penaltis y clasificó a Países Bajos para las semifinales de la Copa del Mundo —acabaría tercera después de derrotar a Brasil—. Ahora le ha tocado regresar al banquillo en favor de Stekelenburg, sucesor de Van der Sar, el portero más determinante de un país que precisamente no ha tenido mucho culto precisamente por el puesto de arquero desde los tiempos de la Naranja Mecánica.

“Yo creo que con el tiempo he mejorado. Tengo más experiencia”, asegura Stekelenburg, el mismo que encajó el gol de Andrés Iniesta en la final del Mundial de Sudáfrica 2010. “El ánimo en la selección no era tampoco el más optimista en aquel torneo y llegamos a la final”, añade. “Hay que creer en nosotros, vernos capaces de todo, digan lo que digan los demás, porque en estas competiciones cortas todo puede pasar”. “Los porteros, además, siempre estamos en boca de todo el mundo”, insiste. “Y es muy fácil juzgar una trayectoria en función de los resultados. Yo todavía estoy de pie porque trabajo duro y tengo fe en mí”, acaba Stekelenburg.

No tiene dudas De Boer, testarudo y convencido de que su plan del 3-5-2 y el puesto de portero quedarán reforzados con el regreso del central De Ligt. Ahora que el equipo recuperó la puntería, no quiere el técnico que sus futbolistas jueguen con retrovisor por los dos goles encajados en dos remates contra Ucrania. Nadie señaló a Stekelenburg.

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