Simeone solo tiene un goleador contra el pánico

La insistencia de Diego Pablo Simeone en contratar a Edinson Cavani contenía el trasfondo del temor a que la irregularidad ofrecida por el Atlético en lo que va de temporada termine por desembocar en la no obtención de una plaza para la próxima edición de la Liga de Campeones. Esa es la línea roja en la que el club delimita la estabilidad que le ha otorgado Simeone en sus ocho años en el cargo. Los mensajes del entrenador desde que en diciembre se supo Diego Costa debía ser intervenido de una hernia discal cervical transmitieron su intranquilidad en los despachos del club. La dirigencia rojiblanca, contraria a fichar en un principio, y la dirección deportiva nunca vieron con buenos ojos la contratación de Cavani. Solo el estado de emergencia en el que vive el entrenador ante los resultados, la desmejoría del juego del equipo en los últimos partidos y la plaga de lesiones forzaron al club a una operación de riesgo —por la edad del uruguayo (33 años) y por su propensión a las lesiones musculares— finalmente truncada. Cavani continúa en el París Saint Germain y en su lugar ha llegado cedido, con una opción de compra, el repescado extremo belga Yannick Carrasco. Simeone pretendía un goleador contrastado y se ha tenido que conformar con un driblador de buena pegada que ahora mismo es una incógnita por los tres meses que lleva sin jugar.

Más allá del juego, el retorno de Carrasco no es a priori la solución a las estadísticas que diagnostican a un equipo muy necesitado de puntería. El Atlético es el equipo de la Liga que más ocasiones claras ha fallado. Sobre un total de 55 oportunidades francas solo ha convertido 16 y ha errado 39, según los datos de OPTA. Los rojiblancos también son el cuarto peor equipo en porcentaje de acierto en el remate con un 8,27%. Solo los tres conjuntos que ocupan las plazas de descenso, Leganés (7,05%), Espanyol (7,2%) y el Celta (7,76%) registran peor tino. El promedio de goles del Atlético, 1,05 por partido, es el peor desde la temporada 2004-05, con César Ferrando como entrenador. El promedio de remates a portería (tres) también es el más bajo desde al menos el curso 2003-04.

Hasta que se recupere Diego Costa, Morata será el único delantero puro del agrado de Simeone. También es el único con unos números decentes (siete tantos) para el goleador de un equipo que debe pelear el título. Correa (3) Costa (2) y João Félix (2) firman un balance goleador individual alejado de lo que se espera de ellos.

Con ese depresivo panorama en ataque y sin Cavani, el Atlético se presenta al derbi, donde le espera el mejor Real Madrid en defensa desde hace 32 años. “Creo que el rival ha mejorado muchísimo en la faceta defensiva en este último tramo de Liga y se le ve muy fuerte en esta situación. Tiene muchas variantes, con distintos futbolistas y será un partido en el que los detalles y la calidad tendrán mucho predominio”, advirtió Simeone. El Cholo ha citado para el derbi a Carrasco. La llegada del belga le ha servido al preparador para lanzar un mensaje que apunta al desencantado João Félix, baja por una lesión muscular: “Viene con mucha ilusión y muchas ganas de estar acá. Y sobre todo la gente que tiene ganas de estar acá nos genera optimismo y compromiso, sin hablar del talento y el fútbol que nos puede dar Yannick en las distintas posiciones de ataque que puede ocupar”.

Con poco fútbol y menos goles, Simeone ha apelado al sentido de pertenencia para tratar de eludir una crisis que tendrá que solventar bajo la presión de su temor a que la plantilla no le ofrezca garantías de poder acabar entre los cuatro primeros.