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Las carantoñas de Mbappé que reanimaron a Vinicius

El encuentro con el francés en el Balón de Oro, el trabajo defensivo y más minutos de juego rescatan la versión punzante del brasileño

David Álvarez
Vinicius, en el campo de Brujas.
Vinicius, en el campo de Brujas.jesús álvarez orihuela (as)

Cuando Vinicius apretaba los dientes en Valdebebas, entrando y saliendo de las convocatorias, jugando ratos sueltos, lejos de su jerarquía del curso pasado con Solari, en aquel pequeño desierto, una excursión a París le alivió como un oasis. “Él no estaba desesperado, pero su familia, su gente, todos estaban tristes por la situación y Vini lo veía en sus caras”, recuerdan en su círculo. Pero el 2 de diciembre volvió a verse entre la realeza futbolística en el Teatro del Chatelet, en la gala del Balón de Oro 2019.

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“Allí se encontró con Mbappé y otros muy buenos amigos, que estuvieron muy cariñosos con él, y eso le ayudó”, cuentan desde el entorno de Vinicius, que esa noche publicó en su cuenta de Instagram una fotografía con el delantero del PSG. Al final del festejo, las votaciones del Trofeo Kopa al mejor jugador sub-21 del año lo colocaron en el cuarto puesto —detrás de De Ligt, Sancho y João Félix—, y le recordaron el lugar en el que todavía lo ve el planeta fútbol. Cinco días más tarde, el brasileño pareció recordarse a sí mismo en el Bernabéu.

En la victoria contra el Espanyol (2-0), como si estuviera jugando en enero o febrero pasados, Vinicius volvió a ser el mayor regateador del equipo —se fugó cinco veces driblando, 83% de éxito— y el que más veces tiró a puerta (tres). Su cuarta titularidad del curso en 20 partidos no se pareció nada a la primera, el 17 de agosto, en la jornada inaugural de LaLiga. Aquella tarde en Balaídos intentó dos regates, solo escapó de uno y no remató ni una vez. Al acabar el partido, Zidane subrayó un aspecto inesperado: “Valoro el esfuerzo de todos, el trabajo defensivo de Gareth y Vini”.

Precisamente esa suerte del juego, y no solo su falta de puntería, ha pesado en que, como reconoce su gente, haya ido cayendo por detrás de Lucas Vázquez, Isco y Rodrygo, por ejemplo. “Zidane le pide que mejore la gestión defensiva”, cuentan. “Sabe que si se queda fuera de la convocatoria es porque debe cambiar alguna cosa. Los errores no son de otros”. Y Vinicius se aplica. Tanto que el sábado rozó la expulsión cuando se lanzó descontrolado a por una pelota y terminó atropellando a David López. Por entonces, minuto 40, ya tenía una amarilla por arrojarse a por otro balón en pugna con Diego López. Esa tarde sumó cuatro robos; en Balaídos fueron dos.

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Había alcanzado el equilibrio. “Ha hecho un gran trabajo en ataque y en defensa”, le elogió Zidane, que, junto a Isco, con el brasileño ha rescatado otro efectivo amenazante para la causa cuando acaban de caer Hazard y Marcelo en su banda, y asoman en el horizonte el Valencia en Mestalla (el domingo) y el Barcelona en el Camp Nou (el miércoles). El belga podría faltar incluso en la Supercopa, del 8 al 12 de enero.

Mbappé y Vinicius, en la gala del Balón de Oro.
Mbappé y Vinicius, en la gala del Balón de Oro.Instagram

A Vinicius le sigue faltando el gol, aunque continúa ajustando la mirilla con dos o tres sesiones semanales extra al final de los entrenamientos con Zidane o sus ayudantes, para orientar el balón en carrera y centrar el disparo, “su talón de Aquiles”, según lo describen en Valdebebas, donde sobre todo Casemiro está muy encima de él. Allí cuentan que este periodo sombrío el brasileño lo ha atravesado sin señales de desaliento: “Se sigue partiendo de risa con todo, nunca ha dejado de ser la alegría de la huerta”. Zidane tampoco le transmite angustia: “En cuanto marque uno, entrará en dinámica”.

Él no afloja: “Sabe que tiene que hacer goles sí o sí; que si no, no va a estar entre los mejores del mundo”, dice su gente, que mientras ve que los minutos de juego y las carantoñas de Mbappé le han levantado el ánimo. “Tengo que tener alegría, mi juego es alegría”, se repite él.

La estancia de Hazard, Lucas y Asensio en la enfermería le vuelve a abrir la puerta como lo hicieron la temporada pasada las lesiones de Isco y Lucas. En otro momento crítico, de nuevo pista libre para Vinicius.

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Sobre la firma

David Álvarez
Sigue la información del Real Madrid y la selección española en EL PAÍS, donde ha sido redactor jefe de la sección de Deportes. Ha cubierto los Juegos Olímpicos, el Mundial de fútbol y la Eurocopa. Antes trabajó en ABC, El Español, ADN, Telemadrid, y La Gaceta de los Negocios. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra.

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