Avistados cinco cadáveres durante la búsqueda de una expedición desaparecida en el Himalaya
Los equipos de rescate intentan localizar a otros tres montañeros, en una temporada fatídica que ha dejado al menos 10 muertos solo en el Everest
Nuevo drama en el Himalaya. Un equipo de ocho montañeros desapareció el pasado viernes mientras subían el pico Nanda Devi en la parte india de la cordillera del Himalaya, en el norte del país. Los equipos de rescate trabajan intensamente desde entonces, y hoy lunes han informado primero del hallazgo de una mochila en el lugar donde se supone fueron vistos por última vez y más tarde han avistado cinco cuerpos, aparentemente sin vida.
Las autoridades han explicado que los alpinistas desaparecieron cerca de la localidad de Pithoragarh, en el Estado de Uttarajand. Se trata de cuatro británicos, dos estadounidenses, un australiano y un guía indio, enlace del Instituto de Montañismo del país, según el jefe de Gobierno local de Uttarajand, Vijay Kumar Jogdande. El equipo había abandonado el campamento base de Nanda Devi para escalar el pico de 7.817 metros, el segundo más alto en la India, y su retorno estaba previsto para el lunes. El grupo de la expedición está liderado por el famoso guía de montaña británico Martin Moran quien, según Jogdande, ha ascendido el pico en dos ocasiones.
El rescate está resultando complicado, ya que las espesas nubes obligaron este lunes a interrumpir el rastreo aéreo en una zona de unos 50 kilómetros cuadrados, delimitada por las indicaciones de cuatro alpinistas británicos rescatados el domingo en las laderas del Nanda Devi. Estos últimos no formaban parte de la cordada, pero estuvieron en contacto con el equipo desaparecido hasta el 26 de mayo, cuando se produjeron fuertes nevadas y avalanchas en el macizo. "De la información de los cuatro escaladores rescatados, tenemos una idea aproximada de por dónde caminaban", dijo R.C. Rajguru, jefe de policía del distrito de Pithoragarh, donde se encuentra la montaña.
La desaparición de estos montañeros se produce en una temporada que ya ha visto morir a al menos 10 alpinistas en el Everest, en este caso fruto de las aglomeraciones en su cumbre, a la que llegan multitud de personas sin apenas preparación para un ascenso de esas características.
