Kaspárov, incisivo y letal (y VI)
En una posición restringida, Kaspárov optimiza sus recursos tácticos y logra una victoria espléndida
Blancas: Td1, Re1, Af1, Th1, Dd2, Ce2, Cc3, Ae3; peones en a2, b3, c4, e4, f3, g2 y h2.
Negras: Ta8, Ac8, Dd8, Tf8, Rg8, Ag7, Cf6, Ce5; peones en a6, b7, c6, d6, f7, g6 y h7.
Esta serie de victorias de Gari Kaspárov sobre Anatoli Kárpov se cierra con una de los más espectaculares. Ocurrió en la ciudad andaluza de Linares, el Wimbledon del ajedrez en esa época porque cada año reunía a los mejores del mundo a finales de febrero. Para Kaspárov, que ganó ese torneo en nueve ocasiones (Kárpov, dos), triunfar en Linares era de capital importancia para no dejar duda alguna de que seguía siendo el número uno indiscutible. Y si además era capaz de hacerlo doblegando una vez más a su encarnizado rival en la partida entre ambos, mejor que mejor. Tal matiz ayuda a imaginar lo motivado que estaba El Ogro de Bakú en la partida que glosa este vídeo, una obra maestra muy espectacular sobre cómo lanzarse al ataque desde la retaguardia en una posición con muy poco espacio. Puro Kaspárov, las fuerzas de la naturaleza volcadas sobre un tablero de ajedrez.
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