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Una ‘pole’ de locos para Jack Miller

El australiano saldrá primero en Argentina al lograr el mejor tiempo en mojado y con lisos en una jornada muy complicada

Nadia Tronchoni
Miller, por delante de Rossi y Dovizioso durante la clasificación.
Miller, por delante de Rossi y Dovizioso durante la clasificación.MARCOS BRINDICCI (REUTERS)

Dicen que no solo el talento cuenta. Que la toma de decisiones distingue a los mejores. En jornadas como la de este sábado en Termas de Río Hondo —ahora llueve, ahora para, ahora chispea, ahora se seca un poco la pista— tomada la decisión había que tener las narices de ejecutarla para conseguir la pole position. Una vuelta perfecta. O simplemente correcta. Eso era lo de menos. Lo vital era no caerse, con gomas de seco o de mojado. Y el piloto con más capacidad para triunfar en esas condiciones salvajes es Jack Miller. Un chaval que se deja llevar por sus impulsos. Que guía con la muñeca y el corazón. Y que logró en Argentina su primera pole en MotoGP con una vuelta de locos.

En 15 minutos de clasificación pueden pasar muchas cosas. Se vio este sábado en Termas. La sesión arrancó con normalidad. Había llovido, la pista estaba algo mojada, no sería fácil. Nada que no se haya visto antes. La revolución sucedió cuando Miller decidió dar un giro con neumáticos lisos, pues algunas zonas del trazado estaban secas. En otras, sin embargo, se levantaba el agua de tremendos charcos. Algunos, como Márquez, casi tan salvaje como él, le imitaron. La mitad del circuito seco, la otra mitad empapado; la mayoría de la parrilla con gomas lisas, algunos atrevidos con neumáticos rayados. El campeón del mundo siempre intenta la heroicidad del día, así que dio una vuelta. Pero decidió que ya había visto suficiente. Volvió tan deprisa como pudo al taller y cambió, otra vez, de moto. De nuevo a las gomas rayadas. Demasiada agua allí afuera.

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Mientras tanto, otros le iban tomando terreno. Como Aleix Espargaró, como Rins, como Pedrosa. Todos mejoraban su vuelta rápida. Y él (finalmente sexto) se había quedado sin tiempo, sin pista libre. Y cuando parecía que Pedrosa se había adjudicado la pole, Miller apareció de la nada en los últimos segundos. En su último intento, y todavía con gomas de seco, el australiano firmó la vuelta rápida. Ni siquiera sabe todavía cómo lo logró. “En la vuelta anterior casi me caigo. He pasado mucho miedo. Pero sabía que a la siguiente me saldría todo mucho más fluido”. “Miller le ha echado... Le ha echado”, resumió Pedrosa, segundo.

Árido el terreno, termales las aguas, soleados los días. Acostumbrados los pilotos de MotoGP a un tiempo apacible, como lo están a cenar asado cada noche en Termas de Río Hondo, este fin de semana del gran premio de Argentina pilló a algunos de los favoritos fuera de sitio. Por ejemplo, Dovizioso, líder del mundial. Llovió. Cada día, de manera intermitente. Y a la ya habitual falta de agarre en el asfalto del circuito argentino, se le sumaron otras tantas complicaciones: la zona reasfaltada (que ocupa todo el primer sector y parte del último) tenía todavía menos tracción, y lejos de mejorar empeoró con la lluvia el viernes; las dificultades aumentaron para los pilotos Ducati con el terrible viento en la primera jornada: esta moto, muy potente, pero también con tendencia a los caballitos, se volvía imposible de manejar con tantos factores en contra. Así que, tanto a Dovizioso, como a Lorenzo les tocó buscarse un sitio para la QP2 en la repesca previa. El primero lo logró (saldrá octavo), al segundo (saldrá 14º) le faltaron unas milésimas fatales y una mejor planificación.

Mientras tanto, Márquez, el piloto que siempre destaca cuanto más se les complican las cosas a sus rivales —si hay poco agarre, a él le va bien, si la pista derrapa, él se lo pasa en grande y tira de freno trasero, si llueve, sigue apretando— mandaba en los libres. A base de vuelta rápida, de adelantamientos al límite, de toques incluso, de casi caídas, como las que tiene cada fin de semana y casi siempre salva. De las cuatro carreras disputadas hasta ahora en este escenario, el campeón del mundo ha ganado dos. Hasta este sábado se había llevado las cuatro poles. Es un circuito de curvas rápidas, ideal para la Yamaha, cuando la M1 era una moto fiable y constante, algo que todavía está por ver este curso. De momento, Viñales saldrá desde la novena posición, Rossi desde la 11ª. Es un trazado muy técnico y ancho, de los que le gustan al de Cervera. El mejor escenario para defender sus líneas agresivas. Intentará hacerlo este domingo. Este sábado le distrajeron los arrestos de otro piloto tan agresivo e irreverente como él.

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Sobre la firma

Nadia Tronchoni
Redactora jefa de la sección de Deportes y experta en motociclismo. Ha estado en cinco Rally Dakar y le apasionan el fútbol y la política. Se inició en la radio y empezó a escribir en el diario La Razón. Es Licenciada en Periodismo por la Universidad de Valencia, Máster en Fútbol en la UV y Executive Master en Marketing Digital por el IEBS.

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