Cristiano Ronaldo: de renovar en noviembre, a plantearse su salida en junio
El portugués firmó una ampliación de contrato con el Real Madrid hasta 2021 a final de año, siete meses antes de ser acusado de fraude fiscal
“Lo que más quiero es poder disfrutar de los años que me quedan por jugar, que son muchos. ¡Me quedan diez todavía!”. La frase la pronunció un sonriente Cristiano Ronaldo a comienzos del mes de noviembre, el día en el que firmó la ampliación de su contrato con el Real Madrid hasta 2021.
Sin embargo, siete meses después, el 13 de junio, la Sección de Delitos Económicos de la Fiscalía Provincial de Madrid presentó una denuncia contra el portugués por cuatro delitos contra la Hacienda Pública supuestamente cometidos entre los años 2011 y 2014 por un fraude tributario de 14,76 millones de euros. Y solo tres días más tarde, el diario portugués A Bola aseguró en su portada que el jugador había comunicado a Florentino Pérez su intención de abandonar el Madrid por “sentirse víctima de una persecución”. Una afirmación que no ha sido desmentida ni por el propio jugador ni por su entorno.
Desde entonces ha pasado casi un mes, y la única declaración de Cristiano acerca de su situación jurídico-deportiva fue un escueto “Conciencia tranquila, siempre”, durante su estancia en Rusia en el transcurso de la celebración de la Copa Confederaciones en la que participó con Portugal. En las oficinas del club de Chamartín aseguran no haber recibido ninguna oferta por el jugador, que tras su última modificación contractual ha pasado a tener una cláusula de rescisión de 1.000 millones de euros.
Cristiano se encuentra disfrutando de sus últimos días de vacaciones y no está previsto que se incorpore a la expedición blanca en Estados Unidos hasta el próximo día 21. Aun así, diez días después, el 31, deberá presentarse en el Juzgado de Instrucción número uno de Pozuelo de Alarcón, a las 11.00 horas, para declarar como investigado en el marco de la acusación por supuesto fraude fiscal en la declaración de los ingresos por derechos de imagen.
Fuentes cercanas al jugador consultadas por este diario aseguran que el futbolista se encuentra muy molesto por el tratamiento que se le ha otorgado por parte de Hacienda y no entienden que lo que consideran una “discrepancia administrativa” haya adquirido la condición de delito y se haya canalizado finalmente por la vía penal.
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